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Saltillo, Coahuila.- Con el propósito de continuar inculcando en la niñez y juventud el gusto por las bellas artes y ayudar a desarrollar el talento de los niños y jóvenes coahuilenses, la Secretaría de Cultura del Estado mantiene abiertas las inscripciones para los cursos regulares del ciclo agosto-diciembre 2022 de la Casa de la Cultura y el Centro Cultural Santa Anita, en Saltillo.
La Secretaria de Cultura, Ana Sofía García Camil, comentó: “El fomento de las bellas artes y el desarrollo e impulso de los nobeles talentos es muy importante, y que estos espacios de enseñanza de las bellas artes se han convertido en semilleros de arte en la niñez y juventud coahuilense”.
La funcionaria estatal invitó a los padres de familia a inscribir a sus hijos en los diversos cursos que se ofrecen en estos espacios, que han visto pasar por sus aulas a varias generaciones de saltillenses amantes de las artes y la cultura.
Para este ciclo, en la Casa de la Cultura de Saltillo ofrece talleres infantiles y juveniles de baile hawaiano, danza árabe, danza jazz, piano, guitarra, artes plásticas y coro juvenil, iniciando clases el 22 de agosto, con un costo de 350 pesos mensuales y 300 pesos de inscripción.
Para mayores informes, los interesados pueden acudir a Hidalgo sur 359 o llamar al teléfono 844 114 39 58.
En el caso del Centro Cultural Santa Anita, se ofrecen talleres infantiles y juveniles de canto, cartonería, danza en telas, danza contemporánea, danza folclórica, gimnasia, guitarra, piano, pintura e infantil, pintura para adultos, teatro y violín, iniciando clases el 22 de agosto de las 14:00 a las 19:00 horas, con un costo de 350 pesos mensuales y 300 pesos de inscripción.
Para mayores informes acerca de horarios y requisitos, se pueden acudir directamente al CCBA Santa Anita, ubicado en calle Jesús Nuncio y Membrillo s/n Fraccionamiento Santa Anita, o al teléfono 844 414 4103.
La funcionaria agradeció a las madres y padres de familia por la confianza hacia estos espacios culturales de darles la posibilidad de contribuir en la formación de sus hijos, así como poder acercarlos a la cultura y las diversas manifestaciones del arte.
“Estos espacios culturales han podido vibrar bajo la presencia de los pasos apresurados, las risas de las niñas y niños, las miradas inquietas, atentas que de todo se maravillan y la energía creadora de múltiples generaciones de alumnas y alumnos que han pasado por sus aulas, dejando huella en los maestros y personal que los atiende con esmero y vocación de servicio”, declaró.
