Las ondas de la explosión pueden haber destruido contenedores de munición liberando toxinas al lecho marino que probablemente han sido desplazadas por las fugas de gas, dice.
LaOtraPlana.com.mx
Copenhague.- Las explosiones que presuntamente causaron los daños a los gaseoductos Nord Stream 1 y 2 podrían haber liberado armas químicas enterradas en el lecho marino, según expertos citados por el diario sueco «Dagens Nyheter».
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, los Aliados hundieron en varios emplazamientos del mar Báltico municiones fabricadas por la Alemania nazi, señala el diario.
Entre ellas se cuentan 30 mil toneladas de proyectiles rellenos de gas mostaza y otras sustancias tóxicas que fueron arrojadas cerca de la isla danesa de Bornholm, en la zona donde se detectaron las fugas en los gaseoductos a finales de septiembre.
Las ondas de la explosión pueden haber destruido contenedores de munición, mientras que otros se han oxidado con el paso del tiempo, liberando toxinas al lecho marino que probablemente han sido desplazadas por las fugas de gas, según el experto Jacek Beldowski.
El profesor del Instituto de Oceanografía de la Academia de las Ciencias Polaca explicó que han sido tomadas varias muestras de la zona que serán analizadas por el Instituto de Investigación Militar de Varsovia en busca de agentes químicos.
Los investigadores subrayan que la liberación de las toxinas no supondría un riesgo directo para los seres humanos pero que si, en lugar de permanecer en los sedimentos del fondo, se desplazan por el agua, pueden causar mutaciones y desórdenes varios en los organismos marinos.
Varias investigaciones
La marina sueca anunció el pasado miércoles que está examinando la zona del siniestro con independencia del proceso penal, mientras que la fiscalía informó el viernes de la apertura de una investigación complementaria en la escena de los hechos.
Ninguna de dichas instituciones detalló qué clase de indicios están buscando, después de que las investigaciones preliminares danesas y suecas reforzaran la hipótesis de un acto de sabotaje, aunque sin arrojar luz sobre la autoría.
El ministro de Defensa danés, Morten Bodskov, ya advirtió a mediados de mes de la presencia de abundante munición de la Segunda Guerra Mundial en el lecho marino, algo que según dijo ralentizaría las investigaciones.
A finales de septiembre se detectaron cuatro fugas en los dos gaseoductos fuera de servicio, dos de ellas en la zona económica exclusiva danesa y dos en la sueca.
Este sábado Moscú acusó a Gran Bretaña de estar detrás del sabotaje de los conductos, aunque sin aportar ninguna evidencia, mientras que en Occidente impera la sospecha de que fueron dañados por iniciativa rusa para desestabilizar a Europa en el contexto de la crisis energética.
(Con información de El Universal)