José Luis Carrillo Ramos
Ya iniciaron oficialmente las Precampañas Presidenciales, casi sin sorpresas.
Dos mujeres; Claudia Sheinbaum Pardo, buscará mantener la Presidencia de la República para continuar el Proyecto Político de la Cuarta Transformación; mientras que Bertha Xóchitl Gálvez Ruíz, buscará regresar al poder al PRI, PAN y PRD. Ahora unidos en el Frente Amplio por México.
Dos hombres: Samuel Alejandro García Sepúlveda, ha dejado la Gubernatura de Nuevo León para convertirse en Candidato Único de Movimiento Ciudadano; mientras que José Eduardo Verástegui Córdoba, Actor y Productor de Cine y Televisión, será Candidato Independiente.
En esta etapa preelectoral, la gran mayoría de las Casas Encuestadoras coinciden en algo: Sheinbaum es la puntera con una diferencia significativa, mientras que Xóchitl se encuentra en segundo lugar, el Gobernador con Licencia de NL, no supera los 10 puntos y todavía más abajo se encuentra Verástegui, que sin duda; al participar busca solamente sus «cinco minutos» de fama, que le dará la aparición en los tres Debates Presidenciales programados por el Instituto Nacional Electoral.
Los oraculeros, expertos futurólogos que saben leer los «oráculos del Poder Político» vaticinan que el resultado final de la Elección Presidencial del primer domingo de junio del 2024, será así como está iniciando esta Contienda Electoral.
Sin embargo, los Equipos de Estrategia de las respectivas Campañas Presidenciales, «tienen otros datos», por lo que tristemente esta contienda puede convertirse en una «lucha de lodo», es decir; «Rudos VS Rudos».
No se necesita saber «leer el Oraculo” para saber hacia dónde se dirigirán los mensajes de los virtuales aspirantes a suceder al Presidente Andrés Manuel López Obrador, Claudia por la continuidad, sin dejar de reconocer «errores» y calificarlos como «áreas de oportunidad; mientras que Xóchitl se irá «con todo» contra ellos para buscar convencer al importante y nada despreciable universo de indecisos.
Samuel repetirá la fórmula ganadora que lo llevó a la gubernatura de la Entidad del Noreste de México; censurar a la «vieja Política», tratando de «vender» su Juventud, 35 Años de Edad; así como sus supuestos logros en tan sólo dos años de Gobierno.
De Verástegui, mejor ni hablamos.
Lo preocupante es que, al menos entre los Opositores, pareciera que más que ser cautelosos en sus mensajes, buscarán «atizarle» al fuego, Estrategia totalmente entendible; aunque cuestionable, por lo que se corren riesgos serios de que las Campañas Presidenciales aviven un clima Nacional sumamente violento y para nada recomendable.
Muchos dirán que pido mucho, al solicitar mesura y responsabilidad en sus discursos políticos, sobre todo en cualquiera de los tres Debates Presidenciales; sin embargo, creo que no soy el único que está harto de ver los noticieros y periódicos nacionales, que más que transmitir noticias, parecen más dar un «Parte de Guerra».
Francamente que a los mexicanos nos sorprendería gratamente vivir unas Campañas Presidenciales Propositivas y Respetuosas.
Prudencia discursiva…¿Es mucho pedir?
