domingo 24, noviembre, 2024

Sólo nosotros los actores podemos ir a lugares que sólo nuestra imaginación nos permite: Alonso Echánove

Raúl Adalid Sainz

Alonso Echánove es un actor que vi brillar intensamente en el firmamento cinematográfico allá por los ochentas.

La primera vez que lo vi fue en la cinta «Historias Violentas», haciendo un pequeño papel dentro de aquellas varias historias que componían esa película. La figura de Alonso en un inmenso cine (El desaparecido Maya) se hacía notar.

Por 1986 lo vi, en lo que quizá fue su primer estelar, la película, «Amor a la Vuelta de la Esquina», al lado de Gabriela Roel y dirigidos por Alberto Cortés. La fuerza, el estilo padrote, inundaba la pantalla con creatividad emitida por el buen Alonso.

Por esos mismos años lo viví en una de sus mejores películas e interpretaciones, «Los Motivos de Luz», dirigido por Felipe Cazals, haciendo mancuerna con Paty Reyes Spindola. «Sebastián» era su personaje, un macho mexicano irresponsable viviendo a las faldas de su madre. Magnífico trabajo interpretativo dentro de esa aún vigente cinta con guion soberbio de Xavier Robles.

Un sin fin de cintas realizó Alonso. Lo recuerdo también en «Pueblo de Madera», dirigido por el querido Juan Antonio de la Riva, una serie televisiva llamada, «El que Sabe Sabe», dirigida por Felipe Cazals y una extraordinaria actuación de Alonso en «Mentiras Piadosas», de Arturo Ripstein al lado de Delia Casanova. Alonso interpretaba un yerbero en el viejo centro del DF. Aún recuerdo aquella secuencia en la azotea de una vieja vecindad, ahí Alonso y Delia haciendo el amor como fieras en brama, en pleno día, teniendo como fondo el Zócalo de la Ciudad de México. La pasión como una diosa enjaulada.

Uno de sus entrañables trabajos lo pudimos ver en «Modelo Antiguo» de Raúl Araiza. Aquel chofer simpático de barrio que lleva por los rincones más adorables del DF a Silvia Pinal. «Juan», su personaje, al final de cuentas es un romántico y acaba enamorándose de su patrona. Personaje creado por Alonso con una gran inspiración, obtuvo el «Ariel», y el amor del público que aún lo recuerda.

Por este mismo personaje ganó en 1994 en Nueva York, por la asociación de críticos de esa ciudad, el premio a mejor actor, en esa terna competía Javier Bardem por «Jamón Jamón» del director Bigas Luna.

Hoy en plena madurez de Alonso Echánove, vive un retorno a su plena existencia. Es un ser humano que transmite alegría, paz, reconciliación con él mismo. Estos procesos de vivencia los imprimió en el último trabajo que le vi, la película, «Cuatro Lunas»; Alonso borda un ser humano lleno de noche y luz. Extraordinario trabajo.

Tuve el gusto de conocer a Alonso compartiendo set en, «Familia Gang», dirigida por Armando Casas. Fue un enorme placer conocerlo. Un ser generoso, alegre, sabio. Tenemos un amor compartido por nuestro adorable maestro Raúl Zermeño, QEPD. Docente formador de Alonso en Xalapa, en aquella compañía de teatro que formara Raúl en la Universidad Veracruzana.

Alonso Echánove, te mando un enorme abrazo de felicitación y recibe este escrito como un homenaje a tu persona y a tu gran trayectoria actoral. ¡Feliz Cumpleaños!

Tu amigo Raúl Adalid.

Texto perteneciente a mi libro «Historias de Actores (un recorrido por el mundo teatral y cinematográfico.)

Nota: El año pasado, en octubre del 2021, el » Festival Internacional de Cine del Bajío», rindió en el Teatro Juárez, de la ciudad de Guanajuato, un sentido homenaje a su hijo actor guanajuatense, Alonso Echánove. Asimismo, se exhibió un bellísimo cortometraje de Alonso, de nombre » Martha», dirigido por el querido cineasta Alex Ramírez. Que toda la luz del buen humor de Alonso, esté siempre con nosotros. Hoy 30 de noviembre del 2022, me entero de tu adiós. No se necesita una eternidad de amistad para sentir una enorme filia por alguien. Así me sucedió con Alonso. Un hombre sin filtros. Expresaba en la pureza su cariño. Mucho nos mensajeábamos. Su último mensaje fue: «La vida es hoy es cada instante. Sólo nosotros los actores podemos ir a lugares que sólo nuestra imaginación nos permite». Nos vemos querido amigo Alonso, salúdame a tu querida madre Josefina, a quien tanto extrañabas. Descansa en paz, muy en paz de luz.

Raúl Adalid Sainz, en algún lugar de México-Tenochtitlan

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