Luis Alberto Vázquez Álvarez
“Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”
Albert Einstein
En México han existido infinidad de partidos políticos de todos colores y toda ideología, Las palabras «Liberal» y «Conservador» aparecieron constantemente aunque con visiones diferentes de nación y sociedad. la inmensa mayoría resultaron oportunistas de ocasión con motivo de las elecciones, pocos con sentido de continuidad. Incluso bajo el largo porfiriato hubo varios partidos políticos, =1904: Círculo Nacional Porfirista=; =1910 Nacional Reeleccionista=; mismo Madero cambió: =1910, Antirreleccionista=; =1911, =Constitucional Progresista=. En 1917 Carranza triunfa por el Liberal Constitucionalista. En los resquicios postrevolucionarios hubo organizaciones más o menos con cierto carácter estable debido a la primera ley electoral de 1918 como el Partido Laborista Mexicano que postuló a Obregón; en 1924 a Calles y repitió en 1928 en la reelección de Obregón, Podríamos considerarlo como el primer ejemplo de continuidad electoral.
Fue hasta después del asesinato de Obregón; que podemos encontrar organizaciones políticas más visionarias y con doctrinas y principios firmes, acordes, en su momento histórico a lo que los signos de los tiempos exigían. Sus justificaciones surgían de intereses de grupos que buscaban mantener el poder, como el PNR, luego PRM y hoy PRI que dice buscar «Democracia y Justicia Social», bueno eso dice él. Supuesto partido que buscaba acabar con el caudillismo y establecer instituciones perdurables y legales.
En 1939 nació el PAN cuyos principios eran emblemas más bien teóricos como Nación, Persona, Estado, orden, libertad entre otros, pero poco o nada entendidos por el pueblo que los veía como continuidad del poder eclesiástico, visión que, cierta o falsa, el PRI se encargo mostrarla como auténtica, además de ligarlos a los cristeros y a los fascistas. Durante décadas fueron arrasados en los comicios, con y sin fraudes electorales, el triunfo les era desconocido; por ello en 1976, cuando la dignidad si era un principio del PAN, no lanzó candidato a la presidencia, ¿para qué, sí todo se lo robaban? y en aquel entonces sus líderes no estaban de acuerdo en transigir con el PRI.
Otas formas de surgir partidos fue a través de regalos presidenciales a ideológos como el PPS a Vicente Lombardo Toledano y PARM a veteranos revolucionarios.
En 1988, ante la imposición del dedo delamadrileño, se registró una inscisón en el PRI y surgió la llamada Corriente Democrática de la que más tarde surgiría el PRD, hoy desahuciado en legalidad pero sobretodo en dignidad.
Resulta que en estos momentos, después de las elecciones de junio y tras la reforma judicial, la oposición prácticamente ya no existe: PAN y PRI están agonizando, sus estertores se escuchan por todo el territorio nacional; múltiples miembros destacados suyos están abandonándolos; algunos dirigiéndose con la corriente política adversaria y otros buscando crear partidos diferentes, pero finalmente debilitando rotundamente a esas dos instituciones.
Ambos enfrentan elecciones internas, con pronósticos muy reservados; El candidato panista a la dirigencia nacional auspiciado por el propio enterrador, no puede cambiar nada, lo más terrible es que hay amenazas de que este partido desaparezca por miembros de la misma familia que lo creó; la necedad de algunos que simplemente propusieron unirse a sus antiguos enemigos por odio a un adversario común, pero dejando atrás décadas de lucha honesta y sincera oposición, hoy solamente intereses personales dirigen a dicho instituto y lo están destrozando. Lástima porque moriría una oposición que si fue real entre 1939 y 1988.
El PRI expira dividido en su seno acosado por la autoridad electoral que no concuerda con el líder actual, quien posiblemente reciba en breve la puntilla que sería la división efectiva, ya vigente y anunciada.
Los dirigentes panistas y priistas, hablan hoy de “refundar” o “reconstruir” lo que ellos mismos han destruido; pero ya los tiempos exigen otros caminos; sería más fácil crear que corregir, Hoy se prefiere la acción social a la acción política; tienen que entenderlo o nunca saldrán de la mediocridad conservadora y volverán a ser abandonados por los votantes.
Tendrán que dejar de realizar montajes; nunca entendieron que gran parte de su fracaso se fundó en que nunca entendieron que atacar por atacar sin ofrecer ninguna propuesta a favor del pueblo así como resucitar e idealizar delincuentes era enterrarse ellos mismo un fatal puñal.