Recién estrenada en Netflix, esta interesante miniserie basada en la oscura secta que aseguraba que éramos réplica de alienígenas y adoraba a los OVNIS, pone el acento en los testimonios de quienes pertenecieron a este poderoso grupo creado por el periodista deportivo francés Claude Maurice Marcel Vorilhon: el fundador y líder espiritual del Movimiento Raeliano, con seguidores en todo el mundo
Víctor Bórquez Núñez
Con buen rigor de entrevistados, incluido el mismísimo fundador de la llamada “religión alienígena”, la miniserie francesa da cuenta en cuatro acotados capítulos cómo Vorilhon se autodenominó el mensajero de los extraterrestres, a quienes consideraba como “nuestros creadores”, poniendo énfasis en los testimonios de los seguidores y fanáticos, así como de quienes fueron sus detractores acérrimos.
Obsesionado con la idea de la clonación, la serie denuncia que Vorilhon, que se hacía llamar entre sus seguidores como Raël, se propuso clonar a un niño, idea que fue duramente rechazada por científicos y significó una dura batalla de la prensa en contra de esta propuesta. A esto se sumó una grave denuncia de las mujeres de la secta que aseguraron maltrato, sometimiento y abuso por parte del autoproclamado mensajero.
Conviene destacar que esta supuesta “religión” glorificaba a los OVNIS, asegurando que los Elohim, una antiquísima civilización extraterrestre y de manera científica sería la creadora de la existencia humana. A partir de esta idea, Raël creó en Francia este movimiento que, en su mejor momento, llegó a muchos países, especialmente a Japón, donde se contabilizaron sus más fanáticos seguidores.
Otras ideas centrales de los seguidores del Movimiento Raeliano planteaban, por ejemplo, que los seres humanos tenemos solamente 25 mil años de antigüedad, estaba especialmente interesado por la clonación humana y daba especial énfasis a descubrir el cuerpo y no temer a las barreras sociales respecto de las relaciones sexuales abiertas.
La sede central de la secta raeliana estaba en Canadá y alcanzó a tener seguidores en más de 90 países, proclamando en todo momento que el ser humano es el fruto de un experimento biológico, que habría sido realizado por los extraterrestres, información que un alienígena habría revelado a Raël, nombrándolo el mensajero de esta supuesta verdad para comunicarla por el mundo.
De acuerdo con sus propias declaraciones, todo esto habría sucedido el 13 de diciembre de l973 fecha en que un “encuentro cercano” con seres extraterrestres cerca del cráter de un volcán de Clermont-Ferrand, en Francia. En ese momento ellos le revelaron la verdad acerca del origen humano y le dieron la misión de compartirla con la Humanidad.
Con toda esta información, la miniserie da cuenta de cómo surge Claude Vorilhon y se transforma en el líder de esta secta, dejando su actividad de periodista deportivo y piloto de automóviles que publicaba una pequeña revista, Auto Pop. Así, se convirtió en el líder y vocero de “la verdad”: debíamos glorificar a los alienígenas que nos habrían creado y que éramos descendientes de los Elohim, los que venían del cielo, afirmando siempre que los humanos habrían sido creados por ellos a través de la manipulación del ADN y de la ingeniería genética.
Pero eso no era todo. Raël también afirmaba que los Elohim habían elegido a diferentes profetas a lo largo de los años para transmitir esta verdad y que, así como antes estuvo Abraham, Buda, Jesús y Mahoma, él era el siguiente mensajero.
Como es de suponer, al interior de la secta se sucedieron una serie de hechos que poco a poco se dieron a conocer, tales como prácticas de amor libre, abuso de menores, maltrato de mujeres y amedrentamiento psicológico, mientras que los fanáticos aseguraban que llegaría el momento en que su verdad sería entendida y la Tierra sería nuevamente contactada por los extraterrestres una vez que alcanzara una madurez en su devenir.
Polémico, controvertido y en muchos sentidos con un mesianismo desproporcionado, este supuesto mensajero de los extraterrestres aseguró siempre que existían seres clonados o recreados después de su muerte, conviviendo en la Tierra con los demás, entre los cuales estaba el mismísimo Jesús. Esos seres tenían vida eterna y serían los que recibirían a los alienígenas cuando estos regresaran a la Tierra.
Esta miniserie está disponible en Netflix.