lunes 1, diciembre, 2025

PICO NORTE

MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA

Un fiscal ex convicto…

Con todo el sello de la 4T, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA escogió un fiscal general para Tamaulipas a su imagen y semejanza: señalado de tener nexos con el crimen organizado.

Así es mis queridos boes, solo falta el trámite de la toma de posesión, pero EDUARDO GOVEA OROZCO, el nuevo Fiscal, puede presumir que fue designado por AMÉRICO, esta vez si, con el control total de las bancadas de Morena y afines, que barrieron con los 38 perfiles restantes.

No es broma, en la minuta de las votaciones finales, no hubo un solo voto a favor de los otros aspirantes, lo que revela que la linea de AMÉRICO esta vez si pesó en el Congreso local, salvo por la tímida, timorata y agachona postura de la oposición encabezada por el PAN, o lo que de ese partido queda en Tamaulipas.

El caso es que GOVEA OROZCO es ya el sustituto de IRVING BARRIOS, que se va de Tamaulipas limpio, triunfante, si lo comparamos con el perfil que llega.

Y es que GOVEA OROZCO trae una historia que en una verdadera democracia, en un gobierno de verdad comprometido con la justicia, la transparencia, humanista, ético y demás características que no tiene el actual encabezado por AVA, no tendría nada qué hacer.

Porque, hay que decirlo con todas sus letras: ESTUVO PRESO acusado de nexos con el CDG en el penal de La Palma en Almoloya de Juárez.

El 14 de febrero del 2002, GOVEA OROZCO junto con una docena más de funcionarios estatales porque, dicen los autos judiciales de entonces, en septiembre del 2001, tras la detención de EL KELIN; líder entonces del CDG, el próximo Fiscal General y otro puñado más de funcionarios le facilitaron la huida, ‘llevándolo’ a la delegación de la entonces PGR en Matamoros.

Luego, escondiendo su identidad lo ‘entregaron’ a la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada en la CDMX.
Meses más tarde, cinco para ser exactos, se descubrió que al que habían entregado no era EL KELIN, sino un delincuente menor.

Trascendió entonces que el capo, al que dejaron escapar, había pagado el favor con una enorme bolsa de fajos de billetes que se repartió entre los cómplices de su huida.

Tras descubrirse la maniobra, GOVEA OROZCO, entonces agente del ministerio público del fuero común, y el resto de los implicados fueron detenidos y llevados a Almoloya de Juárez, donde estuvo preso por unos 7 meses.

¿Cómo salió?, como haya salido, el simple hecho de formar parte de la relatoría de la PGR (hoy FGR) de la lucha contra el CDG de entonces en calidad de acusado y procesado, le sienta un precedente que debió ser motivo suficiente para que no apareciera en las propuestas finales para ser el próximo Fiscal.

Tan grande es la mancha en su historial público, que desde que fue incluido, insisto, por instrucciones de AMÉRICO VILLARREAL como Fiscal Anticorrupción, su pasado volvió a las columnas de opinión nacionales y ahora que es el nuevo Fiscal General, ponen a Tamaulipas otra vez en el tentadero.

Lean a HÉCTOR DE MAULEÓN en su columna hoy dando santo y seña de aquel episodio.

¿Qué necesidad tiene Tamaulipas de que se le señale, ahora con un Fiscal General con tremendo pasado?, ninguno, pero tal vez AMÉRICO VILLARREAL necesita que en ese cargo esté alguien con señalamientos como los que se le hacen a ÉL, de relaciones con bandas del huachicol fiscal, con los nexos que se le documentaron en Sinaloa cuando dicen que subía a la sierra y bajaba con maletas de dinero de aportaciones del narco a la campaña de RUBÉN ROCHA, su compadre gobernador de aquel Estado.

Ojalá, lo digo con casi nada de esperanza, que el nuevo Fiscal General nos sorprenda y con su trabajo logre que se hable más de éste y no de su nada honroso pasado, que solo abona a la narrativa de la oposición del narcogobierno de Tamaulipas.

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