Jorge Arturo Carrillo Parra
El pasado miércoles el presidente Andrés Manuel López Obrador, criticó a los videojuegos por fomentar la violencia y poner en riesgo a menores de edad.
De nuevo, los videojuegos en el foco mediático, como si fuera un todo, como si se tratara de una industria exclusiva para menores de edad; una vez más en la mira de políticos sobre sus supuestos peligros. Esta vez, le toca la pelea al presidente Andrés Manuel López Obrador, y su Subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja, advierten sobre la violencia de “el Nintendo”, en relación a un caso de secuestro que fueron contactados a través de Free Fire.
«Vamos a enviar un mensaje también a las familias, madres, padres, a los niños, a los adolescentes, sobre el riesgo de los juegos electrónicos, del Nintendo. Todo esto que resulta violento y que sin duda afecta, daña. Vamos a hacer una presentación sobre esto. Desde luego somos libres, prohibido prohibir», mencionó.
Sin embargo, en abril de este año el presidente López Obrador, tacho a los videojuegos en general de racistas «los enfrentamientos estos que se dan en los juegos, racistas; en el juego, quitarle la vida a un afroamericano o a un mexicano tiene no sé qué valor, si es blanco, vale más o vale menos».
En ningún caso mencionó la responsabilidad de los padres, en atender a los videojuegos a los que acceden sus hijos.
