lunes 29, abril, 2024

Estrés y vacaciones

-El arte del descanso es una parte del arte de trabajar: J. Steinbeck.

Sanjuana Adame Escamilla

Las vacaciones son un período en el que disminuye o acaba una actividad habitual. Las vacaciones ocurren despés de un periodo de trabajo y/o estudio. Generalmente son un tiempo libre para realizar actividades recreativas, para salir de la rutina o simplemente para descansar.

Las vacaciones se adecúan a las costumbres, ritos, tradiciones y clima de cada país. En la mayoría de los países están reguladas por una normativa gubernamental. Existen principalmente para prevenir el estrés u otras patologías, además, incrementan la productividad  el resto del año.

El término estrés proviene de la Física y hace referencia a la presión que ejerce un cuerpo sobre otro (la fatiga de materiales), siendo aquél que más presión recibe el que puede destrozarse.

Este término fue adoptado posteriormente por la Psicología. Desde esta postura, el estrés es una reacción psico-fisiológica del organismo en el que entran en juego diversos mecanismos de defensa para entender una situación que se percibe como amenazante o demandante, de esta manera, el estrés es la respuesta de un cuerpo ante un desafío.

En correspondencia con el evento estresante, el cuerpo responde mediante el sistema nervioso simpático, reaccionando con actividades de lucha o huida. Y debido a que el cuerpo no puede mantener este estado durante largos períodos de tiempo, el sistema parasimpático tiene la función de hacer regresar el cuerpo a condiciones fisiológicas normales.

El cuerpo desarrolla estos mecanismos para aumentar las probabilidades de supervivencia frente a una amenaza a corto plazo, pero no para ser mantenidos indefinidamente. A mediano y largo plazo, este estado de alerta sostenido desgasta las reservas del organismo. El estrés prolongado provoca inmunodepresión, pues la liberación de hormonas de estrés inhibe la maduración de los linfocitos, encargados de la inmunidad específica.

En 1950 Hans Selye, médico austríaco, publicó la que sería su investigación más famosa: Estrés: un estudio sobre la ansiedad. En ella detallaba los síntomas más comunes de este trastorno: fatiga, pérdida del apetito, bajada de peso y astenia (cansancio intenso, que no mejora con el descanso y que produce incapacidad para la vida laboral, social y de relación) entre otras posibles sintomatologías.

Los estudios de Selye con posterioridad llevaron a plantear que el estrés es una respuesta inespecífica a cualquier demanda energética a la que sea sometida una persona, implicando una respuesta rápida, y, consideró esta situación como un síntoma general de adaptación.  

En el ser humano, el estrés es de dos tipos: negativo (distrés) o positivo (eustrés). El efecto que tienen sobre la persona, se expresa en sensaciones físicas y mentales, como malestar o bienestar, ansiedad o tranquilidad, enojo o placer.

 Estrés positivo o eustrés, es un proceso natural y habitual de adaptación circunstancial, que consiste en una activación durante un mayor período de tiempo, con el objetivo de resolver una situación compleja que requiere de equilibrio entre esfuerzo, conocimiento o inteligencia especializada y entusiasmo o pasión.

Estrés negativo o distrés: es aquel que en el ser humano, supera el potencial de homeostasis o equilibrio causándole fatiga, mayores niveles de ansiedad, de irritabilidad. El estrés mantenido puede provocar la aparición de consecuencias físicas, debidas al aumento del gasto de energía, una mayor rapidez de actuación, menor descanso del necesario y el consiguiente agotamiento de las fuerzas.

El efecto que tiene el estrés negativo a largo plazo en el organismo, ocasiona: taquicardia, taquipnea (respiración anormalmente rapida y poco profunda), liberación en el torrente sanguíneo de cortisol (que puede aumentar la presión aterial) y encefalina (que puede producir deterioro cognitivo). Otras consecuencias son pérdida de cabello, pérdida de la pigmentación de la piel (vitiligo), aumento de los factores de coagulación permitiendo trombos en la sangre que pueden provocor un EVC (evento cardiovascular o embolia).

El causante del estrés puede ser cualquier estímulo externo o interno tanto físico, químico, o sociocultural. Generalmente está asociado al trabajo excesivo, a conflictos emocionales, como problemas de pareja o divorcio, duelo prolongado (más allá de los 6 meses), enfermedades graves o incurables, etcétera. Estos eventos de manera directa o indirecta propician la desestabilización en el equilibrio dinámico del organismo.

Y, como el motivo de este artículo es comprender la importancia del estrés y las vacaciones en la dinámica de las personas, o sea, como producto de la interacción entre las personas y su ambiente, ya se trate de ambiente laboral o escolar. Encontramos que si no hay un equilibrio entre ambos pueden surgir ciertas consecuencias negativas como ansiedad, insomnio, depresión, indecisión o pérdida de rendimiento.

Desde esta perspectiva el estrés se genera cuando se produce una diferencia entre las demandas del ambiente y los recursos de la persona para hacerles frente. Niveles altos de estrés en un ambiente de trabajo o escolar ocasionan un menor desempeño, enfermedades físicas, psiquicas y sufrimiento en la persona.

Es por ello que el trabajador tiene derecho a gozar de vacaciones para salir de la rutina laboral, disfrutar de descanso y diversión para regresar con nuevos bríos al trabajo. Lo mismo sucede con los estudiantes, las vacaciones están programadas para olvidarse de la rutina académica y fortalecer su psique para nuevos aprendizajes.

Durante el período vacacional, las personas pueden elegir, según sus gustos y presupuestos, lugares turísticos, playas, ciudades emblemáticas, museos, cruceros, ruinas arqueológicas, o piscinas y parques locales.

Hay una correspondencia muy significativa entre las actividades laborales o educativas, las vacaciones y la producrtividad de la persona. Se ha encontrado que la combinación entre trabajo y vacaciones proporcionan una especie de cura o convalecencia natural.

Es por ello que algunos países como Suecia, que es uno de los países con mejores oportunidades laborales, mantiene una combinación adecuada entre trabajo, educación y vacaciones.

  • Sanjuana Adame Escamilla, nació en Gómez Palacio, Durango. Radica en Torreón, Coahuila. Tiene Doctorado en Psicología Clínica 

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