-La obra debió haber arrancado a finales de 2023, pero fue inaugurada -hasta ese momento se supo-, apenas en su primera etapa el pasado 21 de diciembre por el Presidente, pero a pesar del sobreprecio en su costo, está inconclusa y es momento que no ha podido surtir de agua, a pesar de los inconvenientes que ya ha provocado
Julián Parra Ibarra
Con bombo y platillos y con la presencia del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en marzo de 2021 se anunció el lanzamiento del proyecto presidencial ‘Agua Saludable para La Laguna’ mismo que –se dijo entonces- tendría un costo de 8 mil millones de pesos –de los cuales en ese año se aplicarían mil 270 millones de pesos-, y la obra quedaría terminada a finales de 2023.
En aquel momento, la entonces directora de la Comisión Nacional del Agua, Blanca Jiménez, sostuvo que, gracias a la visión de López Obrador, este proyecto resolvería de forma integral el problema de consumo de agua con arsénico que existe en la región desde los años 70.
La obra magna, sostuvo el presidente frente a los entonces gobernadores de Durango, José Rosas Aispuro; y de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, así como los alcaldes de la zona conurbada, estaría terminada en su totalidad a finales de 2023 “por lo que debemos de aplicarnos para concluirla”, dijo, y abundó que con este proyecto se garantizaría el abasto de agua en calidad y cantidad para 1.6 millones de personas habitantes de municipios de la Comarca Lagunera, de los estados de Coahuila y Durango.
Desde Presidencia de la República, expuso, se reconocía que los mantos acuíferos de La Laguna, de mantenerse los niveles de sobrexplotación a que han venido siendo sometidos desde hace cerca de medio siglo, les quedaría una vida de 36 años.
Dos años y nueve meses después, en el límite de la fecha marcada por el propio presidente para la conclusión de la obra, regresó para inaugurar el 21 de diciembre pasado lo que hasta ese momento se supo que no era la terminación total de la obra como se prometió, sino una primera etapa de no se sabe cuántas, y con un considerable sobrecosto en relación con el monto de la inversión que en su primer momento ofreció López Obrador.
De los 8 mil millones de pesos de los que se habló inicialmente, se pasó a los 11 mil millones de pesos sin ninguna justificación, aunque el Presidente dijo que se procuraría que el costo total quedara en los 9 mil millones de pesos, porque querían ahorrar.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para aplicarse este 2024, a ‘Agua Saludable para La Laguna’ se le asignaron 5 mil 911 millones de pesos ‘etiquetados’, con lo que el costo total de la obra se elevaría a los 17 mil millones de pesos, suponiendo que este año quede concluida en su totalidad.
El incumplimiento en el plazo fatal marcado por el presidente de la república para el arranque de la obra, habría generado conflictos internos entre las direcciones general y regional de la Comisión Nacional del Agua. German Martínez Santoyo, subdirector general de administración de la Conagua y responsable del proyecto al inicio del mismo, y actual director general de la dependencia, habría incluso ofrecido la cabeza de funcionarios locales ante el atraso de la obra.
Finalmente, para poder cumplir con los plazos –aunque no con la terminación de la obra-, López Obrador vino a La Laguna a inaugurar el 21 de diciembre la primera etapa de Agua Saludable para La Laguna, pero muchos no saben a ciencia cierta qué fue lo que vino a inaugurar el presidente.
El ambientalista Francisco Valdés Perezgasga, presidente de la asociación Prodefensa del Nazas, dice que eso es lo que muchos se preguntan en La Laguna “qué vino a inaugurar, porque cuando vamos al Cañón de Fernández ves en la carretera después del Ejido Los Ángeles zanjas y tubos, cosas a medio construir o sea que ni a Lerdo ha llegado el agua, no sabemos a qué vino si no ha llegado el agua ni siquiera a la planta potabilizadora. Si recordamos, el agua iba a ir del río a la planta potabilizadora, y de la planta potabilizadora a los municipios conurbados de la zona metropolitana de la Comarca Lagunera.
“Pero ni siquiera ha llegado a la planta potabilizadora, no sabemos realmente qué vino a inaugurar, es una obra que está a medias, que falta mucho para que esté terminada, y a mí me surgen dudas sobre la verdadera finalidad del proyecto, si es realmente librarnos del azote del arsénico o es potenciar la especulación inmobiliaria de Torreón, es decir, alimentar con el agua del río, un crecimiento desordenado y explosivo de la ciudad de Torreón”, señala.
Comenta que la alteración en los planes del proyecto inicial despierta suspicacias, “en un principio se dijo que iba a haber mega tanques a la entrada de las ciudades, y ahora dicen que ya no los habrá, y la tubería ya va camino al periférico, hacia el norte de la ciudad donde se está dando el crecimiento”.
“A mí ya me empiezan a entrar dudas de cuál es la verdadera intención de este proyecto, creo que deberíamos a empezar a hurgar un poquito más ahí de por qué está sufriendo estos cambios que no estaban contemplados en el proyecto inicial. Porque también se decía, es que en cuanto llegara el agua, se iban a cerrar los pozos, y ahora lo que dicen los organismos operadores es va llegar el agua, pero los pozos los voy a seguir manteniendo porque tengo que alimentar el agua aquí hacia el norte, y te hacen unas cuentas, pero lo que te están diciendo claramente es que no van a cumplir con el cierre de los pozos de la zona urbana. Entonces yo sí estoy muy inquieto por saber cuál es la finalidad de este megaproyecto”, subraya.
Tratando de empatar con los tiempos de la visita presidencial, el 14 de diciembre el alcalde de Lerdo, Homero Martínez Cabrera, anunció que durante un par de días -16 y 17 de diciembre- se suspendería el suministro de agua potable en todo el municipio, para realizar las interconexiones con las líneas de Agua Saludable para La Laguna con el sistema de pozos que opera el Sapal, y pidió la comprensión de los ciudadanos, a los que en contraparte les ofreció que luego de las interconexiones, quedaría resuelto el histórico problema del desabasto del agua en el municipio, promesa ofrecida hace más de cuatro años y medio durante su primera campaña para la alcaldía, misma que hasta el momento sigue incumplida.
Tras la visita de López Obrador y la puesta en marcha de la obra, se suponía que el agua llegaría en cantidad y calidad suficiente a todos los sectores del municipio lerdense, pero eso no ocurrió. Desde el primer día de este año y al menos durante los primeros 20 días de enero, vecinos de Jardines del Periférico, Quintas Lerdo I y II, Ampliación Quintas Lerdo y Fraccionamiento San Lorenzo entre otros, estuvieron reportando la falta del líquido a través de distintas fuentes, pero el alcalde prestó oíos sordos, e ignoró los llamados de los ciudadanos que en su desesperación, hicieron sus denuncias a través de las redes sociales ante la insensibilidad mostrada por Homero Martínez de no escucharlos, y menos darles solución a sus demandas del vital líquido.
‘En el Fraccionamiento San Lorenzo no tenemos agua desde hace varios días, ya estamos hasta la mad… de esta situación”, escribió un usuario. “En Cerradas Quintas Lerdo no tenemos agua’, mencionó otro. ‘Es un batallar ya con el agua, en Jardines del Periférico no tenemos nada’, dijo uno más.
Los ciudadanos lerdenses cuestionaron que en los múltiples reportes que han realizado al Sapal, siempre encuentran como respuesta que todo está funcionando bien “¿si todo está funcionando bien, entonces porque no hay agua?”. Pero en el organismo operador nadie les puede dar una explicación.
En los tres primeros días del año, Homero Martínez anunció que una vez que el Sapal recibiera el agua de la primeras etapa de Agua Saludable, se desactivarían siete de los nueve pozos de la burbuja de San Fernando, y garantizó que se estarían inyectando a la red municipal 600 litros.
“Si todo sale bien en los próximos días, una vez que recibamos el vital líquido a través del proyecto federal, estaremos dejando fuera de funcionamiento un total de siete de los nueve pozos que actualmente operan en la burbuja de San Fernando. Esto nos representa un ahorro significativo en términos de mantenimiento y operación”, declaró.
Pese a que el agua no llegaba, el municipio decidió dejar fuera tres de sus pozos presuntamente para darles mantenimiento con lo que el problema de desabasto se agudizó, y tratando de amainar los reclamos, el jueves 11 anunció a los medios que ese mismo día estaría llegando el agua del proyecto federal, y el Sapal estaría en condiciones de recibir el líquido.
“Espero que durante el día de hoy llegue el agua potable, serán alrededor de 330 litros, lo que nos permitirá dejar fuera de funcionamiento alrededor de siete pozos de agua y, con ello, regularizar el servicio de abastecimiento en la ciudad”, insistió.
Otra vez, nada de eso sucedió y el viernes 12, por enésima ocasión, Homero Martínez volvió a anunciar la llegada del líquido del proyecto Agua Saludable para La Laguna para ese mismo día con un volumen de 400 litros por segundo, mientras los habitantes de las colonias del norponiente de la ciudad según sin recibir gota de agua en sus tomas domiciliarias; los más afortunados empezaron a recibir agua en pipas enviadas por el municipio.
Sin embargo, ese viernes 12 una vez más el alcalde lerdense volvió a notificar que esa interconexión de las líneas de Agua Saludable a las redes del municipio implicaría una vez más “la desactivación de un gran número de pozos de extracción, lo que en buen cristiano significaba que una buena parte del municipio, incluyendo la zona centro, se volverían a quedar sin el suministro de agua potable, pero además una vez que se lograra la interconexión a la red general, se requeriría un periodo no mayor a tres días para regularizar el servicio.
El 17 de enero, Homero Martínez, acompañado por el gerente del Sapal, Ignacio Ramírez salió ante los medios para tratar de justificar el retraso del operativo del proyecto Agua Saludable que abastecería de agua potable al municipio, argumentando que tras un encuentro con el director de Cuencas Centrales de Conagua, Aarón Fuentes, se expuso que no se logró la suficiente presión para interconectarse a la red del municipio, y que cuando finalmente se hizo, se presentó una complicación en una válvula.
Ello obligó a volver a poner en funcionamiento los tres pozos que el municipio había suspendido, el San Fernando III, el de Villa Jardín y el de Raymundo. A pesar de todas las maromas que se han realizado, lo cierto es que el mega proyecto no ha podido entrar en funcionamiento ni aún en su primera etapa, y son los habitantes de Lerdo los principales afectados, por las decisiones del municipio de desconectar pozos antes de tener la seguridad de contar con el líquido del proyecto presidencial. El desabasto sigue.
“Y lo va a seguir habiendo por años, y luego hay otro problema, en el marco del cambio climático, ya lo vimos este año, la presa está muy baja de nivel, ¿de dónde va a salir el agua para Agua Saludable, a quien se la van a quitar?”, cuestiona el ambientalista Francisco Valdés Perezgasga.
Y advierte que el tema tiene también el potencial de crear todo un problema social, “porque siempre en esas cuestiones el que acaba pagando la factura es la gente más pobre, en este caso los ejidatarios, entonces ¿a quien le van a quitar el agua, como van a malabarear todos estos compromisos que hay de agua ya concesionada para la agricultura, el agua que tiene que ir a Agua Saludable?”
Refiere que en un principio se habló de que los grandes agricultores “iban a donar no sé cuántos millones de metros cúbicos de agua, y eso no se ha concretado absolutamente nada; o sea es el típico megaproyecto que se empieza por una ocurrencia y ahí en la marcha lo arreglamos, y en la marcha han estado cambiando muchas cosas y levantando estas sospechas de cuál es la verdadera finalidad del proyecto.
- Francisco ¿Por qué la prisa de venir a inaugurar algo que no está terminado y decir que ya está en marcha?
“Yo creo que la prisa obedece a un imperativo político, o sea, el demostrar que es un presidente que sí cumple con sus compromisos, por eso inauguró el Tren Maya aunque nada más llegue hasta Cancún, por eso inauguró Dos Bocas cuando es fecha que no refina nada, por eso inauguró el tren Transítsmico. El Cuchillo II lo inauguró dos veces, el Hospital de Gómez lleva dos o tres inauguraciones, en distintos sexenios, pero en este lleva dos inauguraciones. Entonces yo pienso que es el imperativo político de demostrar que es un presidente que cumple, pero esa demostración está sustentada nada más en la propaganda”.
Al igual que muchos en La Laguna, Valdés Perezgasga pone en duda que el proyecto presidencial funcione tal como se dijo durante su presentación en marzo del 2021, sobre todo porque se supone que entrará en funciones en uno de los años recientes que el sistema de presas del Nazas se encuentra en uno de sus niveles más bajos. Al reporte de Conagua del 19 de enero, la Lázaro Cárdenas estaba al 48.29 por ciento de su capacidad de almacenaje, en tanto que la Francisco Zarco estaba al 31.21 por ciento. Ambas a menos de la mitad.
“Sobre todo por la cuestión del cambio climático, todo está pronosticado para que las sequias sean más prolongadas y más profundas, entonces como haces que el agua potable de millón y medio de habitantes depende ahora de una fuente que tú no controlas, que son las lluvias, que van a estar cambiando por culpa del cambio climático”.
- Si no hay el agua suficiente para el ciclo agrícola y para el programa Agua Saludable ¿a quién le van a quitar el agua, si los campesinos la tienen concesionada, ellos son los dueños?
“No dueños en un término jurídico, digamos, pero sí ellos tienen el derecho de usar esa agua, y no se les puede quitar así nada más. Pero ojo, en la Ley de aguas sí hay una prohibición que dice que el presidente de la república puede cancelar concesiones si son de utilidad nacional. ¿Qué es eso de utilidad nacional?, pues es una cuestión abierta a la interpretación, pero sí yo creo que no está bien pensando, que no se integró el tema del cambio climático en este proyecto, y que no se atacaron las causas raíz del arsénico en el agua, que es la sobre explotación del acuífero”.
- Esa facultad de la que hablas del presidente ¿podría ser la puerta para que entre el presidente y les pudiera cancelar concesiones a os ejidatarios?
“Esa es una posibilidad, aunque también cabe la posibilidad que se las cancele los grandes lecheros. Pero hemos visto en cada ceremonia que viene el presidente a ver el tema de Agua saludable, el presidente del grupo lácteo más grande de país está a un ladito de él, y ya este sexenio se ve que hay un término por el que se expían todas las culpas que es empresario con dimensión social. Ahora Eduardo Tricio es un empresario con dimensión social, ya es parte del sistema que nos gobierna”.
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