Incertidumbre y confusión por el nuevo ciclo escolar
Jessica Rosales
A pocos días del inicio del ciclo escolar 2023-2024 algunos padres de familia, incluso algunos docentes, tienen incertidumbre por la ausencia de libros de texto con los cuales puedan trabajar los estudiantes.
Hace algunos días, la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió a favor del Gobierno de Coahuila, que a través de su área jurídica interpuso una Controversia Constitucional con lo que logró el freno en la distribución de los libros de texto gratuito.
Y de aquí vino la histeria colectiva provocada también por la desinformación de los seguidores de la 4T y uno que otro despistado que desvirtuaron el protocolo a seguir ante esta circunstancia.
Efectivamente, cuando se interpuso el recurso legal no se sabía a ciencia cierta cómo iban a enfrentar esta situación. Chihuahua que ya se había adelantado, comenzaba a solicitar la donación de libros de texto del ciclo anterior y en Coahuila se vislumbraba la misma situación.
Incluso, el secretario de Educación Francisco Saracho Navarro, solicitó a la Conaliteg (Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos) la reimpresión de los libros del ciclo anterior, y que hacerlo en lo local sin un permiso sería cometer un delito. A pesar de ello, la Conaliteg hizo oídos sordos, mientras que la SEP federal ordenó la entrega de los nuevos libros de texto bajo la advertencia de que iban a impugnar, ignorando el derecho que obtuvo el estado.
Ante ello, el estado convocó a una colecta masiva para entregar los libros de texto del ciclo pasado, pero como siempre pasa en los grupos de padres de familia y redes sociales no faltó aquél o aquella que preguntara quien los tenía en venta y tampoco faltó quien los ofreciera.
La Secretaría de Educación en el estado trabaja en este tema y ha indicado a los docentes prepararse para que el primer mes trabajen con los niños con cuadernillos especiales que se han elaborado, principalmente para las materias de español y matemáticas, y se ajusten a los planes y programas de estudio anteriores.
Sin embargo, esto no ha dejado satisfecho al gremio magisterial que pidió a los maestros participar en una jornada nacional de consulta sobre los contenidos de los nuevos libros de la Nueva Escuela Mexicana ¿Hasta ahora? ¿Por qué el sindicato no exigió al gobierno federal conocer con bastante antelación dichas modificaciones? Esto tiene casi un año cocinándose.
Cabe mencionar que, de acuerdo a lo que ha compartido el presidente del colectivo San Aelredo, Noé Ruiz Malacara, la reforma educativa es muy buena y positiva en su planteamiento, pero no se refleja ni está plasmada como originalmente se presentó en los nuevos libros de texto.
Es decir, que, si incluso el tema de la inclusión tampoco benefició a los grupos vulnerables algo muy malo ocurrió en el camino, pues al final llegaron libros de texto a modo de un partido político y todo lo que originalmente se había planteado como un gran cambio no llegó a las páginas de lo que verán los estudiantes.
Lo que debería hacer el sindicato es coadyuvar a la capacitación de los docentes, los padres de familia dejar de estar generando histeria colectiva y la secretaría de educación informar puntualmente en las escuelas y a la población sobre los planes a seguir, ya que no tener certeza aún significaría otro año de rezago en el sistema educativo del estado. El Presidente, definitivamente debe dejar de estar gobernando a su capricho porque está poniendo en riesgo la educación de nuestros hijos.