¿MODA, TENDENCIA, NECESIDAD, OLFATO COMERCIAL? ¿TODAS LAS ANTERIORES?
Un usuario de Twitter criticó duramente el hecho de que Netflix siempre pone a «un personaje gay innecesario» en sus series y películas, en lo que denominó como “propaganda” de un estilo de vida no siempre compartido por todos. La respuesta de la plataforma digital más consumida en el mundo fue contundente. No obstante, lo que nadie puede negar es que el universo LGTBI+ está expuesto, en distintos géneros, con abundancia. Acá, una aproximación a la visibilización de un tema que para algunos es una tendencia mientras que otros reclaman que es casi una moda. Decida usted
Víctor Bórquez Núñez
Sabemos que Netflix es una de las plataformas digitales más consumidas en todo el mundo. Ha marcado un estilo y llegó a acaparar la atención de los especialistas por la calidad de sus producciones que, incluso, han obtenido galardones tan importantes como el Óscar de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográfica. Pero también tiene el plus de ser el streaming que más ha integrado a la comunidad LGTBI+ en muchas de las series y películas que ha creado.
Para ellos concienciar a la sociedad sobre la diversidad sexual es una de las grandes tareas de la ficción y eso lo han desarrollado de manera contundente por medio de series notables que están o estuvieron en su cartelera, partiendo por “Merlí”, hasta la magnífica “Historias de San Francisco” (2019), teniendo en medio una cantidad creciente de material que habla directamente de las opciones sexuales en un momento en que este tema forma parte de la agenda social.
Lo interesante es que esto no parece haber molestado a los espectadores de la plataforma, aunque sí hay varias voces que se quejan del hecho de que en la mayoría de las ficciones aparezca un personaje gay o lésbico, sin que necesariamente exista una justificación respecto del argumento o la ilación del tema general. Con ello, aparece la duda: ¿se trata acaso de un gancho comercial, de una moda, una tendencia o una auténtica necesidad?
Estas quejas han ido aumentando, no por las series o películas en donde aparecen personajes gay o lésbicos, sino por la pertinencia de su aparición, la justificación de su presencia o, derechamente, la necesidad de que esté allí. Así, el tema se hizo viral cuando este año un usuario publicó una imagen en la que criticaba que Netflix siempre mete un «personaje gay innecesario» en sus series. La respuesta de la plataforma a través de su sitio oficial no se hizo esperar y fue tajante: «Perdona si todavía no te has dado cuenta de que cada persona gay es muy necesaria».
Esta polémica nos sirve para repasar el universo del tema LGTBI+ que se encuentra disponible en Netflix, independiente de que cada uno de los espectadores, tenga su particular opinión respecto de la cantidad de ese material, aunque en casi la gran mayoría de las veces, nadie critica la calidad de las propuestas.
El tema fue creciendo en las redes, donde en unas horas el tuit que manifestaba su malestar por la cantidad de personajes gay o lésbicos en la plataforma y la respuesta de Netflix alcanzó más de 67.000 retuits y 400.000 ‘likes’ (y subiendo). Gran parte del debate se centró en el tema de que la excesiva cantidad de material LGTBI+ puede ser un tema para discutir con seriedad, sobre todo cuando se señala que «respetan» que haya gays pero que «no es lo normal» porque «los niños suelen ver esas series» sin tener a veces los elementos de juicio de un adulto para guiar o explicar que el mundo tiene muchos matices en las preferencias sexuales.
En todo caso, Netflix mantiene su política de aportar con series o películas que tienen su tema central en el ámbito LGTBI+, aun cuando parece que todavía le queda mucho camino por delante para concienciar a toda la sociedad sobre esta temática LGTBI+.
LA DIVERSIDAD DE MIRADAS
Nadie puede negar que muchos se preguntan por qué de tantas series y programas de Netflix, donde aparecen personajes LGBTI+. Para algunos la respuesta existe y es clara: esto se debe al grupo GLAAD, un poderoso lobby que trabaja dentro del cine, la televisión, el mundo de las noticias y los medios digitales, cuya misión central es la exigencia de que el 20% de los personajes deben representar a la comunidad LGBTI+ para 2025.
Ello explicaría el hecho incuestionable que, en los últimos meses, haya crecido la cantidad de personajes con una clara identidad homosexual o lésbica que, para muchos espectadores, fue molesto, sobre todo cuando en las temporadas anteriores no existían- Y muchos ironizaron diciendo que era sospechoso que, de pronto, todos “salieron del closet”, incluso en series animadas para niños.
Así, la cada vez más potente presencia LGBTI+ en los medios de comunicación es una táctica para normalizar estas conductas.
Como antecedente importante: en 1989, dos homosexuales especializados en psicología y persuasión, Marshall Kirk y Hunter Madsen, publicaron su famoso libro After the Ball, explicando los pasos a seguir para normalizar la homosexualidad en la sociedad. “Esta es una campaña de propaganda descarada firmemente basada en principios de psicología y publicidad», declaraban en el libro. Entre sus 6 pasos a seguir, uno era «parecer muchos”.
De este modo, parece evidente que poniendo personajes LGBT en teleseries, canciones, tertulias, comics y hasta dibujos animados, se ha conseguido que la gente considere que son muchos más de lo que se pensaba. Esto se afirma con un dato de la encuesta de Gallup en 2011: En Estados Unidos un tercio de la población cree que uno de cada tres compatriotas son LGBTI+.
Y, bueno, para muchos quien lidera esta “campaña” es precisamente la plataforma de Netflix con más de 121 personajes LGTBI+ en sus series y que lidera el ranking que estableció GLAAD respecto de los canales de streaming que sí visibilizaban el universo LGTBI+, donde ahora la cantidad de series animadas para niños y niñas centradas en este tema es evidente,
Otro elemento para tener en cuenta: el propio Disney está reescribiendo las historias clásicas, ahora dentro de un contexto LGBT y con personajes animados lesbianas, homosexuales y transexuales. ¿Ejemplos? La “reescritura” de clásicos como “La Bella y la Bestia”, “El rey León”, “La Sirenita” y un largo etcétera. Pixar, que pertenece a Disney, estrenó en marzo “Onward”, donde uno de los personajes principales, un cíclope, es una lesbiana que tiene pareja y viven felices.
¿Más ejemplos? La compañía Marvel, que también pertenece a Disney, ha anunciado dos superhéroes LGBTI+: uno transgénero “no binario” y el otro homosexual.
Respecto de las razones entregadas por Disney: estamos en un “momento LGBTI+” lo que significa que “queremos representar a nuestra audiencia”. Para un gran sector de la sociedad es solo oportunismo y el deseo de adoctrinar a quienes están frente a la pantalla o en sus parques de diversiones (en junio de este año Disney adhirió al mes del orgullo LGBTI+ con marchas dentro de sus parques). Sí. Disney.
Algunos dicen que la solución es tan simple como apagar el televisor y poner a funcionar el cerebro. Otros plantean que esto es una “maquinación”. El asunto es que el tema crece y se consolida, siendo Netflix su estandarte (al menos en la cantidad de propuestas asociadas) y la vitrina de un proceso inédito en el mundo mediático.
Acá una pequeña muestra de series LGTBI+ de Netflix, para que vea y opine:
TÚ NO ERES ESPECIAL
DESPAREJADO
HEARTSTOPPER
ÉLITE
SEX EDUCATION
JÓVENES ALTEZAS
HALSTON
BONDING
AJ AND THE QUEEN
DÍA A DÍA
FEEL GOOD
GRACE AND FRANKIE
HISTORIAS DE SAN FRANCISCO
HOLLYWOOD
LA CASA DE LAS FLORES
LO MÁS VISTO
LAS CHICAS DEL CABLE
RATCHED
ORANGE IS THE NEW BLACK
LOS DIARIOS DE ANDY WARHOL
COMANDO QUEER
QUEER EYE
SENSE 8
SPECIAL
COLTON SALE DEL ARMARIO
SUPERDRAGS
THE OA
THE POLITICIAN
UNBREAKABLE KIMMY SCHMIDT
TODO ES UNA MIERDA YO NUNCA
