sábado 24, mayo, 2025

Dogma de Fe 

Marcos Durán Flores

En el béisbol, los cambios tienen la velocidad de una bola lenta

El béisbol se mueve lento. Las bolas rectas son cada vez más rápidas y superan las 100 millas por hora, han inventado un conteo de lanzamientos y otros trucos para que los juegos sean más rápidos y entretenidos, pero al final el béisbol sigue siendo lento. Por eso, las Ligas Mayores, luego de décadas, levantó finalmente las suspensiones permanentes de Pete Rose, «Shoeless» Joe Jackson y otros 15 fantasmas desterrados… Aunque todos ya están muertos. 

Si usted cree en el cielo, imagine a Rose y «Shoeless» allá arriba haciendo una señal obscena al comisionado Rob Manfred. Joe Jackson murió en 1951 y fue el gran chivo expiatorio del infame escándalo de los Black Sox por vender la serie mundial de 1919. Condenado injustamente, Jackson cumplió cadena perpetua beisbolística por su presunta participación, a pesar de que se confirmó que se negó a aceptar los 5.000 dólares del soborno. En esa serie mundial, «Shoeless»  bateó .375, el promedio más alto del equipo, acumuló 12 hits, un récord de Serie Mundial que duró hasta 1964, y no cometió errores en el campo. Estos datos sugieren que, si Jackson intentó perder el campeonato, lo hizo de forma bastante deficiente. Además, los otros siete jugadores implicados afirmaron que no estaba involucrado, y en 1921 un jurado de Chicago los absolvió a todos de cualquier delito. Jackson ganó una demanda en 1924 contra los White Sox por salarios atrasados. 

En el caso de Rose, él aceptó que apostaba a favor de su equipo y, sí, aceptó una suspensión de por vida. El gran Pete Rose murió el otoño pasado, pero no levantaron su suspensión. 

El castigo a Rose fue por apostar, no en contra, sino a favor de que su propio equipo, los rojos de Cincinnati, ganaran. En su última entrevista, 10 días antes de morir a los 83 años, Rose declaró: «He llegado a la conclusión —espero equivocarme— de que entraré al Salón de la Fama después de morir». 

Líder histórico de hits de las ligas mayores, Rose debería haber sido incluido en la primera votación, pero el béisbol las cosas avanzas con lentitud. «Shoeless» Jackson, un bateador de .356 en su carrera (cuarto de todos los tiempos), también debería haber sido absuelto e inducido en Cooperstown hace años. Sé que Rose no fue un tipo fácil hay que admitirlo. Lo llamaban «Charlie Hustle» por su estilo de juego, sus barridas de cabeza, pero su vida después de su carrera adquirió matices de la connotación negativa de «estafador». Como pedir autógrafos el fin de semana del Salón de la Fama en la calle principal de Cooperstown, a poca distancia del santuario que lo vetó. Los fanáticos también hacían fila para conseguir esos autógrafos, porque, a pesar de sus imperfecciones, este era el líder histórico de hits del béisbol. Entonces y ahora, esto ocurre demasiado tarde.

La eliminación de los jugadores fallecidos de la lista de inelegibles de las ligas mayores, marcó una gran diferencia, pues al fin, el Salón de la Fama del Béisbol abrió sus puertas a los fantasmas que habían estado esperando. Su presidenta Jane Forbes Clark, declaró: «El Salón siempre ha mantenido que cualquier persona expulsada de la lista de inelegibles permanentes será elegible para ser considerada para el Salón de la Fama». El salón podría haber tenido la valentía de hacerlo sin la aprobación de las ligas mayores, pero se acobardó y no lo hizo. 

Y repito, en el béisbol las cosas avanzan lentas. Y es que el próximo paso será que el Comité de Reseña Histórica del Salón (compuesto por 10 historiadores del béisbol) elaborará una lista con ocho nombres —Rose y  «Shoeless» seguramente entre ellos— para que el Comité de la Era Clásica del béisbol vote por ellos. 

Este último comité considera a aquellos cuyo mayor impacto en el béisbol ocurrió antes de 1980 y está compuesto por 16 miembros. En otras palabras, a partir de aquí, 26 personas decidirán el destino de Rose y Jackson, pero esta reunión ocurrirá ¡hasta diciembre de 2027!

Así que si en un par de años un grupo de hombres deciden que lo merecen, Pete Rose y «Shoeless» Joe Jackson finalmente estarán en el Salón de la Fama. Lo dicho: En el béisbol, los cambios tienen la velocidad de una bola lenta.

@marcosduranfl

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