Desconectar para conectar
Arcelia Ayup Silveti
Sabemos de sobra la gran cantidad de información que recibimos a diario, sumado a las actividades, reuniones, trámites y proyectos que muchos de nosotros manejamos cada día.
Se incrementan los depósitos de estrés en el cuerpo y la mente se satura, es momento de acercarse a una válvula de escape para equilibrarse y seguir creando. Conozco personas que desde el primer momento de la mañana atienden su celular y pasan mucho tiempo con él.
En reuniones contestan mensajes, llamadas y redes sociales, pero alejados de quienes les rodea.
Les disgusta estar sin compañía, ven películas o programas de televisión. Incluso durante sus comidas, mantienen contacto con alguno de estos medios.
Hay muchas formas de mantenerse en equilibrio, te comparto las que me ayudan a conectar con mi interior. Practico yoga, meditación y camino con mis perros en lugares abiertos.
Éstas tres me han servido para permanecer en el aquí y en el ahora, para alejarme de pensamientos y pendientes, y con ellas aprendí a escuchar los sonidos de alrededor y fluir.
Con el yoga y la meditación he notado que me ayudan a tener mayor concentración en lo que hago, reduce el estrés, me ayuda a dormir mejor, me relaja y aumenta mi autoestima. Además, con el yoga se queman calorías, aprendes a respirar de manera consciente y disminuye los niveles de cortisol, la hormona que genera el estrés.
Con la meditación se pueden reducir emociones y pensamientos negativos, aumenta la imaginación y la creatividad, frena el envejecimiento, mejora la memoria y el estado de ánimo y se puede lograr estabilidad emocional, es decir reconcilarte contigo.
Cualquier tipo de meditación es favorable, no es necesario ser budista.
La que se adapte a ti será la indicada, desde las guiadas que están de manera abierta en redes, en algún centro de meditaciones o la consciente, que se practica en todo momento, con lo que estás experimentando y sintiendo en el momento, sin etiquetas ni juicios.
La tercera, caminar con mis perros, es el baño verde o baño de campo que compartí en otra columna. Dicha práctica invita a sumergirse en los sentidos y la naturaleza.
Pasear entre los árboles, usar los sentidos, percibir el silencio, los colores, aromas y estar el cien por ciento en el aquí y el ahora, alejado de celulares y cualquier equipo tecnológico es otra manera de generar una conexión interna.
Va pues esta tímida invitación a desconectar para conectar.
biznagaas@hotmail.com