Por si te animas
Arcelia Ayup Silveti
Hace días una amiga me compartió un texto sobre el beneficio de la miel de abejas. Complementé la información con artículos documentados, y preparé el presente texto. Esta sustancia dulce es una gran fuente de nutrientes y de energía. Es producida por las abejas que recolectan néctar de las flores o de las secreciones vivas de algunas plantas.
Una abeja vive cerca de cuarenta días, visita casi mil flores y produce menos de una cucharadita de miel durante su vida. Dicho néctar se transforma al mezclarlo con sustancias propias, es decir, con enzimas que almacenan en panales de la colmena y tras un periodo de maduración, se obtiene la miel.
Su consumo se remonta a diez mil años antes de Cristo, con el padre de la medicina, Hipócrates, quien la usaba para sanar enfermedades de la piel. Mientras que los egipcios la aplicaban para curar heridas, quemaduras, para embalsamar cuerpos y como parte de los alimentos que el difunto llevaba en su viaje al más allá.
Debido a la riqueza en macro y micronutrientes se convierte en un alimento ideal para personas que necesitan recobrar vitalidad, como anémicas o convalecientes. También ayuda al organismo a restablecer su ritmo y mejorar el riego coronario, al aportar energía a la musculatura cardíaca, al favorecer la producción de fosfatos.
La lista de beneficios de la miel continúa, ya que si la agregas a la leche, al queso fresco o al yogur, aporta grandes beneficios para la salud y mucho menos calorias que el azúcar común. Los médicos la recomiendan en dosis equilibradas para diabéticos, deportistas, niños, personas mayores, trabajadores que realizan esfuerzo físico o una fuerte carga intelectual, pero no es del todo beneficiosa para los bebés.
La miel es rica en antioxidantes, los especialistas aseguran que el consumo regular ayuda a disminuir el riesgo de ataques al corazón, embolias y hasta ciertos tipos de cáncer. Algunos estudios han demostrado que sustitruir miel por azúcar contribuye a reducir el colesterol malo, ayuda a disminuir los triglicéridos, aumenta el flujo sanguíneo, previene la formación de coágulos y protege al corazón del estrés oxidativo. Puede reducir la tos en niños y ayuda a curar quemaduras y lesiones aplicada sobre la piel. También leí que uses una cuchara de madera o de plástico para servirla, ya que al contacto con el metal las enzimas mueren. Por si no te animas a consumirla con lo anterior, muchas de nuestras abuelas la usaban y se enfermabn poco.
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