Rubén Olvera
Coahuila reconquista el liderazgo en inversión automotriz
Mientras el país está sumido en conflictos políticos, el crecimiento industrial de Coahuila y la afluencia de nuevas inversiones no se han detenido.
Los últimos datos publicados por el Directorio Automotriz en su Informe de Inversión Automotriz indican que Coahuila ha recuperado su posición como líder nacional en la atracción de inversiones dentro del sector en 2024.
Según el citado informe, Coahuila captó más de 2,231 millones de dólares entre enero y junio de este año, superando significativamente a sus adversarios más cercanos que compiten por atraer inversiones en la industria automotriz, incluidos Puebla, Nuevo León, SLP, Guanajuato y Querétaro.
Esta inversión es producto de 18 proyectos confirmados, que se estima generen al menos 10,000 empleos en los próximos años, sin incluir las ocupaciones adicionales generadas en la construcción de la nueva infraestructura de hospedaje industrial.
El último Reporte de Mercado Inmobiliario de CBRE, consultora inmobiliaria líder a nivel mundial, destaca a Saltillo y Ciudad Juárez como los principales enclaves industriales del norte de México en 2024. Según el estudio, la capital de Coahuila registra una absorción neta de 300 mil metros cuadrados en alojamiento industrial dentro de los sectores automotriz y manufacturero en lo que va del año.
Me pregunto cómo mejoraría la situación económica del país si los grupos políticos y las autoridades canalizaran su energía en acciones para mejorar la competitividad y promover el desarrollo, en lugar de enfrascarse en batallas políticas. Alguien debería poner orden y fijar prioridades.
Evitemos, sin embargo, mezclar la economía con la política y centrémonos en las buenas noticias que el sector automotriz ha traído a Coahuila este año.
El Informe de Inversión Automotriz señala que los 18 proyectos relacionados con autopartes, equipos, materias primas y parques industriales se establecerán en los municipios de Saltillo, Ramos Arizpe, Monclova, Frontera, Nava, Ciudad Acuña, Matamoros y Torreón. Esto refleja una gestión de inversiones más equilibrada para todas las regiones del estado, un punto que he defendido constantemente en esta columna.
Dentro de todo, llama la atención lo que está sucediendo en Derramadero, al sur de Saltillo. El crecimiento industrial en esta zona es notable. Cuesta creer que un pastizal logró reconocimiento internacional en pocos años. Desde la llegada de la planta Chrysler en 1995, el sector automotriz ha atraído constantemente nuevas inversiones, incluida la instalación de Freightliner en 2007.
El complejo de Derramadero no solo luce impresionante, comparable a los principales parques industriales del país, sino que, con las nuevas plantas de fabricación de neumáticos, Zhongce Rubber de China y Yokohama de Japón, consolidará su posición como un polo de crecimiento industrial en el norte de México.
El año aún no ha terminado. ¿Podría Coahuila recuperar su antiguo estatus como imán de inversiones automotrices en 2024 y, al mismo tiempo, promover un desarrollo regional más equilibrado?
Como señala el Informe sobre el Desarrollo Industrial 2024 de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), un recurso muy recomendable para los responsables de las políticas estatales: “La industrialización no ocurre espontáneamente. Precisa inversiones, esfuerzos coordinados y políticas cuidadosamente diseñadas”.
En materia industrial, que se hagan “políticas” y se reserve la “política” para las elecciones.