Tradicionalmente el país ha tenido una política de exportación restrictiva en la que se tiene como principio no destinar material bélico a zonas de conflicto, salvo circunstancias especiales
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Alemania ha enviado a lo largo de este año armas a Ucrania por valor de 2.240 millones de euros (2.390 millones de dólares), según se desprende de una respuesta del Ministerio de Economía a una pregunta de la disputada Sevin Dagdelen del partido La Izquierda.
En total las exportaciones de armas alemanas alcanzaron en 2022 los 8.350 millones de euros (8.907 millones de dólares) lo que representa el segundo monto más alto desde 1949, solo superado por los 9.350 millones de euros (9.975 millones de dólares) alcanzados en 2021.
Más de una de una cuarta parte de las armas exportadas fueron a Ucrania, según cifras del Gobierno.
Las ventas de armas al extranjero, incluso prescindiendo del efecto especial que tiene la guerra de Ucrania, han sido especialmente altas en lo que va del año.
Eso se ve si se considera que durante los 16 años de Gobierno de Angela Merkel solo en cinco ocasiones se superó la marca de los 6.000 millones de euros (6.400 millones de dólares).
Tradicionalmente Alemania ha tenido una política de exportación de armas restrictiva en la que se tiene como principio no enviar material bélico a zonas de conflicto, salvo circunstancias especiales.
Cada venta de armas tiene que ser aprobada por un órgano presidido por el Ministerio de Economía y cada caso se decide de forma individual.
Recientemente, el presidente de la República Federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, instó en su discurso navideño a apoyar a los “atacados, los amenazados, los oprimidos” hasta que en Ucrania “pueda reinar la paz”.
Hacerlo constituye un “mandato de humanidad”, afirmó el presidente alemán en su tradicional alocución.
Steinmeier subrayó que para que se pueda poner fin al conflicto hace falta una paz “justa”, que “no recompense el robo de tierras y abandone a las personas de Ucrania al arbitrio y la violencia de unas fuerzas de ocupación”.
Una paz así, sin embargo, no es “tangible” por el momento, indicó, a pesar de que este año el fin de la guerra es posiblemente “el deseo más acuciante” de los ciudadanos.
Agradeció a los alemanes la solidaridad demostrada en la crisis actual, que los ha “exigido” mucho y los ha obligado a “limitarse”, en vista de las consecuencias económicas.
“Queridos conciudadanos, ustedes sienten las consecuencias de la guerra, sobre todo las consecuencias económicas. Pero soportan la carga, porque el destino de los ucranianos no les es indiferente, porque su lucha por la libertad no les es indiferente, porque son solidarios y humanos”, afirmó.
(Con información de Infobae)
