FRANCISCO J. DE LA PEÑA
LADRÓN QUE ROBA A LADRÓN
Muy interesante la información que reveló este domingo el periodista lagunero Francisco J. Rodríguez: Los 579 millones de pesos que Estados Unidos le confiscó al ex tesorero de Coahuila, JAVIER VILLARREAL, y que en julio de este año el tabasqueño LÓPEZ OBRADOR anunció con bombo y platillo que el Departamento de Justicia de ese país le había devuelto a México, no aparecen por ningún lado.
El ”mesías de Macuspana” aseguró que ese dinero le había sido depositado al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, pero en respuesta a una solicitud de información hecha por el periodista en mención, resulta que en ese Instituto no tienen idea de dónde quedó el dinero. Al menos ahí nunca llegó. Ante esa respuesta, Rodríguez le preguntó a la Secretaría de la Hacienda a ver si ahí sabían algo, y le respondieron lo mismo: ese dinero nunca llegó a sus cuentas bancarias.
Entonces, ¿dónde quedó el dinero? Porque a Coahuila tampoco se lo mandaron. ¿Se habrá quedado AMLO con él? Piensa mal, y acertarás, dice el refrán. ¿O se lo habrá mandado a su hermano Pío en sobres amarillos, para aportar al “movimiento” (al movimiento de dinero a paraísos fiscales)? ¿O tal vez lo invirtió en el inusualmente próspero negocio de sus hijos, la chocolatería con la cual todo el sexenio se la pasó justificando las enormes sumas de dinero que, producto de negocios turbios y tráfico de influencias, le permitieron a sus retoños amasar una considerable fortuna? Dicen que ladrón que roba a ladrón, tiene cien años de perdón. De ser cierto ese dicho popular, AMLO ya lleva como mil años de amnistía acumulados.
REVENTARON LA ELECCIÓN
Finalmente, en Morena no se pudieron poner de acuerdo para elegir al nuevo presidente de su Consejo Estatal. Ante el pleito a muerte entre las tribus del “Team Guadiana” y del “Dúo Dinámico”, ni el representante de los primeros, JONHATAN ÁVALOS, ni el abanderado de los segundos, ANTONIO ATTOLINI, se pudieron quedar con la tan anhelada posición. Hará falta entonces que venga el hijo de AMLO —quien sigue mandando en Morena— para tratar de poner orden en este conflicto tribal.
Lo que si eligieron fueron las otras carteras vacantes, las de menor importancia: En menos de una hora, Nancy Cuevas Sánchez resultó elegida como responsable de Finanzas, con 26 votos. En la cartera de Mujeres, Karina Estrada obtuvo el triunfo con 18 votos, mientras que en Jóvenes, Marco Beltrán fue seleccionado con 21 votos. De los 55 consejeros con derecho a voto, solo participaron 46. A los otros nueve les pasó de noche el proceso.
El resultado fue celebrado por Attolini como si él hubiera ganado, lo que hace presumir que los tres elegidos forman parte de su tribu. Habrá que ver qué opinan los del “Team Guadiana”, porque todo el proceso estuvo salpicado por el pleitazo que desde hace meses mantienen CECILIA GUADIANA y LUIS FERNANZO SALZAR, aunado a la desorganización y el débil liderazgo que caracteriza a DIEGO DEL BOSQUE.
LA SOLUCIÓN “MEXICANA”
Diversos analistas políticos en la Ciudad de México están anticipando que a Altos Hornos de México le espera una solución parecida a la de Mexicana de Aviación, lo cual sería una pésima noticia.
La aerolínea, que llegó a ser la más importante de México, fue creada en 1921, pero en 2010, tras 89 de operación, se declaró en concurso mercantil y suspendió sus operaciones. Cuatro años después, en 2014, se declaró formalmente en quiebra, pero tuvieron que pasar nueve años más, hasta el 2023, para que el Gobierno Federal la “rescatara”, pagando la irrisoria cifra de 815 millones de pesos, que fueron distribuidos entre 7 mil 407 empleados. A cada uno le tocaron 110 mil pesos, es decir, poco más de 8 mil pesos por cada uno de los 13 años que transcurrieron desde que Mexicana dejó de volar, hasta que los liquidaron. A los proveedores no se les dio ni un peso partido por la mitad.
Ojalá que los analistas se equivoquen, y que a los activos de AHMSA les espere un mejor destino que a los de Mexicana. Ser “rescatados” por el Gobierno Federal es una falacia, un escenario indeseable. Lo que se espera es que surja algún inversionista interesado, aunque para eso primero hace falta que el síndico lleve a cabo los avalúos correspondientes, y se tome la decisión si los activos existentes se venden todos juntos, o en partes. Ardua tarea la que le espera.
Y EL TIGRE, ¿DÓNDE QUEDÓ?
Hablando de AHMSA, ¿recuerdan que cuando andaba en campaña en pos de la gubernatura de Coahuila, RICARDO MEJÍA BERDEJA prometió que iba a ser él quien iba a solucionar el conflicto? Perdió la elección, y de los obreros de Altos Hornos jamás de volvió a acordar. Ni siquiera ahora que es diputado “pluri” ha vuelto a mencionar el tema. “Prometer no empobrece, cumplir es lo que aniquila”, es, por lo visto, la premisa que guía las acciones del “Tigre acapulqueño” Berdeja.
