Se curan en salud
Julián Parra Ibarra
En una por decir lo menos ‘rara’ conferencia, el monero Rafael Barajas ‘El Fisgón’ y el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, fueron mandados por ya saben quién, para enviar un mensaje que me parece tan claro como contundente: que si las cosas no marchan como se desea en Palacio Nacional de cara a la elección presidencial, va a haber una apuesta por la violencia, algo que en este país se es experto sobre todo en los años recientes.
El par de personajes trataron de curarse en salud. En una actitud ya terriblemente deplorable de alguien a quien se consideraba un crítico del sistema a través de sus cartones políticos y hoy dedicado abiertamente a la zalamería de los cuatroteros, el Fisgón dijo que si al bloque opositor “no les funciona el tema Xóchitl Gálvez, muy probablemente apuesten por la violencia”, que no es otra cosa que una declaratoria de estarse curando en salud.
Contrario a la ley de la gravedad que nos dice que todo lo que sube tiende a bajar, como en esta administración no quieren que les salgan con que la ley es la ley y como siempre tienen otros datos, han acuñado su propia máxima: todo lo que se arrastra, tiende a subir. El Fisgón para quedar bien con su patrón y patrocinador, fue más allá al asegurar que el Frente Opositor plantea su propio plan nacional –lo que es más que obvio, ¿a poco quería que planteara el mismo plan cuatrotero?-, pero fue muchísimo más allá al asegurar que se trata de una estrategia golpista que es ‘sicarios más noticiarios’ la cual busca según él ‘desestabilizar’ sobre todo a través de campañas mediáticas y de hechos delictivos.
El gran problema para el Fisgón y sus patrones, es que gracias a que se ha intentado aplastar a Xóchitl Gálvez con todo el poder y la fuerza del estado, la han crecido al grado tal que en Palacio Nacional el nerviosismo ha crecido conforme va creciendo la popularidad de la Senadora en apenas tres semanas de que el propio presidente la subió súbitamente a la carrera presidencial, y parece que ‘el tema Xóchitl’ sí está funcionando más de lo que ella misma hubiese llegado a imaginar, y de lo que el propio presidente pensó que llegara a suceder cuando le cerró las puertas de Palacio Nacional, y ahora ve como un gran fantasma no que entre, sino que pudiera ser la siguiente inquilina de Palacio.
Y, el gran problema para Xóchitl y el Frente Opositor, es que el mensaje ya fue dado: si las cosas no salen como se quieren, podría haber una apuesta por la violencia, que de hecho ya empezó a implementarse con la violencia que todos los días se vomita desde el púlpito presidencia en contra de la hidalguense, pero el meollo del asunto es que esta pudiera ir creciendo y trasladarse a la violencia física. Además de la violencia que se ha empleado al utilizar información confidencial y delicada de las empresas de la hidalguense, hiperinflada además para hacerla aparecer ante ‘el pueblo bueno’ como la millonaria que no es, lo que la pone en riesgo a ella y a su familia.
Por ello desde varios frentes ya se viene advirtiendo lo que se deja entrever que ya se fragua desde las más altas esferas del poder y, por un lado, el partidista responsabiliza desde ahora al propio Presidente de lo que pudiera sucederle a Xóchitl, a su familia, a los clientes de sus empresas; y por el otro lado, las voces que ya se empiezan a levantar para que se establezcan medidas de seguridad para la nueva némesis del principal inquilino de Palacio Nacional, porque hasta el momento se sigue moviendo como lo ha hecho toda su vida, sin un equipo de seguridad y sin transportarse en vehículos blindados.
Ella dice que a título personal no cuenta con recursos ni para contratar guardias personales, ni para adquirir un vehículo blindado para sus desplazamientos, pero conforme avanza esta guerra entre ‘David y Goliat’, puede ser el ‘pueblo bueno y sabio’ el que se convierte en el principal cuerpo de seguridad y protector de la más débil en esta desigual lucha.
Sobre todo, cuando en la más reciente medición entre los aspirantes a la candidatura por el Frente Opositor, en la que Gálvez ya se situó en la primerísima posición con arriba del 60 por ciento de intención en relación con el resto de los inscritos y a una gran distancia; y en relación con los de la ‘tienda de enfrente’, ya se colocó a un par de puntos de la corcholata preferida del presidente.
Como ciudadanos, debemos estar muy atentos al desarrollo de todos estos hechos en rededor de la elección presidencial del año entrante. Hay que estar muy pendientes de la ‘cura en salud’ que ya nos dijeron los voceros y mandaderos del Palacio: que si las cosas no salen como se pensaban, podría haber una apuesta por la violencia. Mucho cuidado.
@JulianParraIba