Qué tiempos
Julián Parra Ibarra
De acuerdo con el discurso oficial del actual Gobierno Federal, en México vivimos otros tiempos, ya no hay corrupción, ya no hay impunidad, ya no se miente, ya no se roba, ya no se traiciona, porque ya no son ‘como los de antes’, y uno se pregunta entonces ¿qué tiempos estamos viviendo?
Al principio de la administración se alentaron muchas esperanzas, mismas que llevaron a que más de 30 millones de mexicanos decidieran en las urnas un cambio de gobierno, que ofreció terminar con todas, o casi todas las calamidades que históricamente flagelaron a este gran país.
Se escuchaba muy bonito cuando se ofreció que se daría empleo a los migrantes centroamericanos, que podían venir todos aquellos que abandonaban sus pueblos por necesidad, no por gusto. La realidad nos golpea hoy a todos en el rostro, en un país en el que los grupos del crimen organizado reciben abrazos, no balazos; y nuestros hermanos migrantes centro y sudamericanos son tratados como delincuentes y dejados morir como si fueran animales.
Lo ocurrido en la estación migratoria de Ciudad Juárez donde murieron 39 personas que estaban encerrados en celdas como si fueran delincuentes, a los que se dejó morir cuando el fuego arreciaba y el humo invadía todos los espacios, no hubo el mínimo gesto de humanismo para permitirles salvar sus vidas. Son a los que se invitaba a venir a México donde serían recibidos con visas para poder trabajar. Irónicamente salieron de sus países huyendo del infierno en el que vivían, y literalmente encontraron la muerte en un infierno.
En el reparto de las culpas nos dicen que la seguridad en esa estación migratoria estaba a cargo de una empresa privada, pero ¿qué no es este el gobierno que al principio de la administración dijo combatir a fondo el outsorcing? Al que prometió que se iba a erradicar y sin embargo ellos mismos lo siguen practicando. Porque igual se encontró recientemente que el esquema de subcontratación también se ha dado a manos llenas en Segalmex, y todavía más, en Palacio Nacional.
Ya no es como antes, pero se descubrió en Segalmex el más escandaloso y grande fraude en la historia de México, pero no ha pasado nada, el que era su titular y responsable de desvíos superiores a los 15 mil millones de pesos –tres veces la ‘Estafa Maestra’- fue reubicado en otro puesto para alejarlo del ‘ojo del huracán’. No hay detenidos, ni consignados y menos sentenciados por esos millonarios desvíos, pero en este gobierno que no es tapadera de nadie, no existe ya la impunidad.
¿Lo mismo ocurrirá con los responsables de la muerte de los 39 migrantes en la estación migratoria de Ciudad Juárez? ¿El hecho de que la seguridad estuviera subcontratada con una empresa privada, exime al gobierno de su responsabilidad, si los detenidos estaban bajo su custodia?
En el aire quedan un montón de dudas y preguntas, si el Ejército ejecuta a un puñado de jóvenes en Tamaulipas, si un empresario lagunero es ejecutado frente a su hija en una carretera de Zacatecas, donde el narco se ha enseñoreado, un estado hermoso que hoy se ha convertido en tierra de nadie, un territorio en el que no hay ninguna seguridad para poder transitar por sus carreteras.
Si estos ya no son los tiempos ‘de antes’, que nos expliquen cuáles son los tiempos que estamos viviendo ahora, pero más que nos expliquen, que nos demuestren con hechos qué es lo que los hace diferentes, porque igual la violencia sigue en una espiral ascendente en muchas partes del país, porque igual se siguen dando actos de corrupción ‘como antes’, y el sello es la impunidad que ya no iba a existir porque estos son otros tiempos.
¿Cuáles son esos otros tiempos? ¿Qué tiempos estamos viviendo? ¿Cuál es la diferencia al México ‘de antes’ y el de ahora?
Como mexicanos, hayamos o no votado por el cambio en el gobierno, teníamos la esperanza de un verdadero cambio, de una auténtica transformación de nuestro país, de que así fuera paulatinamente se combatiera y terminara la corrupción, la impunidad, la violencia, del renacer de un país que es tan grande y maravilloso, que los peores políticos que lo han gobernado no han podido acabar con él.
Si alguien puede y quiere, se lo agradecería mucho, que a muchos que no lo sabemos, nos expliquen cuáles son los tiempos que estamos viviendo, porque desde lo más alto del poder nos repiten hasta el cansancio que estos ya son otros tiempos, ya no son como los de antes ¿cuáles son esos otros tiempos y cuál su mejoría?
@JulianParraIba