Caso atípico
Julián Parra Ibarra
El del gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, es un caso atípico en el mundo de la política, sobre todo en nuestro país, donde el ejercicio del poder desgasta, y paulatinamente los niveles de aceptación de parte de los ciudadanos, va disminuyendo se podría decir casi de manera natural.
Con el lagunero la cosa ha venido ocurriendo a la inversa, cada mes que transcurre, se consolida como el mandatario mejor calificado del país, y en un constante crecimiento en los niveles de aceptación y reconocimiento de parte de los ciudadanos coahuilenses.
En la medición al mes de febrero, que mes a mes realiza la casa encuestadora Mitofsky, Riquelme Solís se mantiene en la primera posición con un 64.1 por ciento de aceptación, superior a la calificación recibida al cierre de enero, que fue de 62.9.
El panista yucateco Mauricio Vila, con quien durante más de un año estuvo disputando la primera posición, al cierre de febrero se desplomó de la segunda hasta la cuarta posición. Entre ambos están el morenista sinaloense Rubén Rocha Moya y el verde ecologista potosino Ricardo Gallardo Cardona. En la quinta posición está el panista queretano Mauricio Kuri.
En la parte baja de la tabla, de acuerdo con Mitofsky las últimas 10 posiciones, del 23 al 32, están ocupadas por el morenista nayarita Miguel Ángel Navarro, la campechana morenista Layda Sansores, el tamaulipeco morenista Américo Villarreal, el morelense de Encuentro Social Cuauhtémoc Blanco, el sonorense de Morena Alfonso Durazo, el poblano morenista Sergio Salomón Céspedes, el priista duranguense Esteban Villegas, la morenista guerrerense Evelyn Salgado, la morenista colimense Indira Vizcaíno, y el zacatecano morenista David Monreal Ávila.
La morenista de la CDM Claudia Sheinbaum, la corcholata preferida del Presidente, está en la posición 14, por cierto, entre los mandatarios mejor evaluados.
Una pregunta que se hace cada vez más recurrente es ¿cuál será el destino político de Miguel Ángel Riquelme una vez que termine su mandato?
Con las cartas credenciales que presenta, su futuro está en sus manos, él y nadie más que él podrá decidir a dónde irá y cuál será su siguiente responsabilidad política y pública. Nada más, pero tampoco nada menos.
@JulianParraIba
