Las necesita
Julián Parra Ibarra
La presidenta electa de México anunció que se tomará unos días, apenas tres, para de alguna forma gozar de una luna de miel que no pudo disfrutar en noviembre pasado que contrajo matrimonio con Jesús María Tarriba. La verdad es que los necesita, le harán muy bien para poder tener ‘bien recargadas las pilas’ para lo que le va a tocar enfrentar a partir del 1 de octubre próximo.
Más que su amigo o aliado, el –todavía- principal inquilino de Palacio Nacional, pareciera que es el principal enemigo de Claudia Sheinbaum. En la recta final de su administración Andrés Manuel anda con la espada desenvainada tirando golpes a todo lo que se mueva, a todo lo que se la pare enfrente, y parece importarle muy poco que le va a dejar el camino minado–por lo menos el tramo inicial- a su sucesora.
López Obrador ha venido actuando sin el mínimo respeto a quien le sucederá en el cargo. Una regla no escrita que todos los anteriores presidentes cumplieron al pie de la letra es que una vez electo el nuevo mandatario, y tras una primera entrevista entre ambos, el saliente de manera natural empezaba a ceder el centro del escenario, las luces, los reflectores, al entrante. Paulatinamente iba desapareciendo.
Pero con el actual ha sido todo lo contrario, es cuando mayor protagonismo quiere tener, y ha tomado a la presidenta electa como si fuera su empleada; ella le ha tenido que acompañar a las giras que él quiso, por las entidades del país. Y no sé si ordenado, acordado o ejerciéndose a sí misma una autocensura, pero ha tenido que ser la ‘caja de resonancia’ de lo que se diga en Palacio Nacional, avalando lo que sea, a pie juntillas y sin moverle ni cambiarle ni un punto ni una coma, repite todo lo que el tabasqueño diga.
Los mexicanos esperamos que a partir del 1 de octubre Claudia Sheinbaum muestre su verdadero carácter y estilo de gobernar, independiente, con el corte del cordón umbilical. Para bien o para mal, la gente voto abrumadoramente por ella. Hoy todo lo que haya y diga, así sea el eco de la voz que se levantara en ‘La chingada’, es su responsabilidad y deberá hacerle frente como tal. Incluso va a tener que ocuparse en su entrada, en tratar de deshacer todos los entuertos que le deje en curso López Obrador.
Aunque sean tres días –deberían ser más- que disfrute estas vacaciones. Las necesita, para todo lo que se le viene.
X= @JulianParraIba
