¿Será?
Julián Parra Ibarra
A finales de noviembre y ante legisladores integrantes de la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados, la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana del gobierno federal, afirmó que, a cinco años de la actual administración federal, se había logrado “revertir la espiral de violencia”, y que los resultados de la nueva estrategia, “serán duraderos”
Ya sabe usted que como ‘ya saben quién’, la terca realidad siempre tiene otros datos, y nos dice que, hasta el pasado lunes, en el actual sexenio se han acumulado 174 mil 598 muertes violentas, lo que le otorga al actual la categoría del sexenio más violento en la historia reciente de nuestro país, de acuerdo con cifras del propio gobierno, son los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Después de la masacre ocurrida el pasado fin de semana en Salvatierra, Guanajuato, la organización Causa en Común, dio a conocer que, de acuerdo con sus registros, entre el 1 de enero de 2020 y lo que va de 2023, en el país se han contabilizado un total de 2 mil 130 masacres, de esas que dice el presidente que ya no hay en nuestro país, y hasta la provoca carcajadas.
Solamente por mencionar algunas de las más recientes, podemos mencionar la emboscada en la que fueron asesinados 13 policías, entre ellos el secretario de Seguridad Pública de Coyuca de Benítez, en Guerrero; el enfrentamiento entre habitantes de Texcatitlán en el Estado de México contra extorsionadores pertenecientes a la Familia Michoacana y en la que resultaron 14 personas muertas, y varios de los pobladores del lugar siguen desaparecidos; y la de Salvatierra, Guanajuato que dejó 12 víctimas mortales.
Recordemos el caso de los seis estudiantes de medicina asesinados recientemente en Celaya; y los cinco jóvenes desaparecidos en Lagos de Moreno. En estos dos últimos casos, al igual que el de Salvatierra, el principal inquilino de Palacio Nacional no mostró como es su costumbre, un poco de solidaridad con los jóvenes asesinados o desaparecidos y sus familias, no ha ofrecido ninguna solución a los casos, pero en cambio sí los ha revictimizado, con una insensibilidad y cinismo los ligó con el consumo de las drogas, pese a que en el caso de los estudiantes de medicina las necropsias no arrojaron rastros de ninguna droga.
Pero dice el presidente que vamos muy bien, y que la gente en el país vive feliz, feliz, feliz ¿será?
X= @JulianParraIba