Juan Antonio Martínez Barrios
Los Chorros: un problema insostenible
Definitivamente es insostenible el peligrosísimo estado de la carretera federal 57, en su tramo conocido como Los Chorros, municipio de Arteaga, Coahuila, donde ocurren en promedio tres accidentes por semana, muchos de ellos con saldo de personas fallecidas.
Hoy se cumple una semana de que se registró el enésimo siniestro, precisamente en el citado tramo, en el que cuatro monjas que se dirigían al Museo del Desierto, en Saltillo, perdieron la vida, y una más resultó con serias lesiones, luego de que un tráiler que circulaba con exceso de velocidad y sin guardar la distancia debida, embistió el automóvil en que viajaban y lo prensó contra otro tráiler. El pavimento estaba mojado, trabajadores de Caminos y Puentes Federales (Capufe) realizaban labores de mantenimiento aparentemente sin los señalamientos adecuados.
Se trata de un tramo de 10 kilómetros sumamente peligroso, con 18 curvas y 700 metros de declive. Suman 10 kilómetros críticos, desde el entronque a San Antonio de las Alazanas, donde inicia la pendiente, hasta el kilómetro 230 en las curvas de Los Chorros. Y a pesar de ello los elementos de la Guardia Nacional y demás autoridades no hacen acto de presencia preventiva, sino cuando se presenta un accidente. Lo utilizan miles de vehículos, sobre todo de carga, que se dirigen del centro al norte del país y viceversa.
Cada año el intenso tráfico se incrementa en elevadas proporciones y lamentablemente también el número de accidentes y la pérdida de vidas humanas, a las que se suman los millones de pesos en daños materiales, pues de cada tres percances por lo menos en uno tiene que cerrarse la vialidad ante la volcadura o incendio que sufren las unidades siniestradas. A pesar de las funestas estadísticas y de los insistentes llamados al Gobierno Federal para que aporte recursos y se modifique el trazo de Los Chorros, la respuesta ha sido nula hasta la fecha. Se plantea agregar un carril por sentido, lo que implicaría una inversión de mil millones de pesos.
Para el gobernador del Estado, Manolo Jiménez Salinas, “es insostenible lo que está pasando”, y ha tomado el toro por los cuernos al plantear que se autoricen recursos adicionales, por medio de la Cámara de Diputados y alcanzar la coordinación específica del caso con autoridades militares y locales para establecer medidas preventivas. Los siniestros en Los Chorros se han convertido en un grave problema social y económico. Ciertamente insostenible.
