Los aspirantes y el divisionismo
Juan Antonio Martínez Barrios
A semanas de que el Instituto Electoral de Coahuila, que está estrenando consejero presidente en la persona de Rodrigo Paredes, inicie formalmente el proceso para las elecciones de gobernador y diputados locales, los partidos políticos definen perfiles de posibles candidatos y sufren el divisionismo provocado por los intereses personales sobre los partidistas.
Así, el PRI aparenta unidad y manda mensajes en el sentido de que su candidato a suceder a Miguel Ángel Riquelme Solís será el secretario de Inclusión y Desarrollo Social y exalcalde de Saltillo, Manolo Jiménez, quien desde principios de año y amparado en el puesto que ostenta viene desplegando un amplio activísimo llevando programas sociales a todos los rincones de la entidad.
Sin embargo, como para no perder el control del proceso interno, el lunes pasado el mandatario Riquelme Solís, además de Manolo, mencionó como posibles candidatos al presidente municipal de Torreón, Román Alberto Cepeda González, y al diputado federal Jericó Abramo Masso. Por lo demás, se da por hecho que el tricolor integrará una coalición con el PAN y con el PRD, como única fórmula para poder retener la Gubernatura. Las negociaciones entran en fase crítica y definitoria.
En Morena los aspirantes Armando Guadiana Tijerina y el expanista Luis Fernando Salazar Fernández están convencidos de que el candidato a gobernador será impuesto desde la capital del país y que no será otro que el subsecretario de Seguridad, Ricardo Sóstenes Mejía Berdeja, con todo y que no lo favorezcan las encuestas y que le pese su desarraigo en la entidad. La duda es cómo reaccionarán cuando la unción se incline oficialmente hacia el llamado “acapulqueño”, que mantiene una desesperada campaña por subir escalones y posicionarse en el ánimo popular.
Por su parte, la Unidad Democrática de Coahuila, que dirige el ex diputado federal y tres veces alcalde de Ciudad Acuña, Lenin Pérez Rivera, ha descartado totalmente aliarse lo mismo con Morena que con la eventual coalición PRI-PAN-PRD. Eventualmente iría junto con Movimiento Ciudadano, partido que a nivel nacional no se junta con la chusma, pero la dirigencia local emecista tiene aval para suscribir acuerdos de coalición con partidos locales, en este caso la UDC. Pero con aliados o no, es un hecho que Pérez Rivera será el candidato a gobernador por la UDC y huelga apuntar que le restará un importante número de votos a Morena.
