Entre división interna y acusaciones.
Juan Antonio Martínez Barrios
En medio de disputas internas, de impugnaciones públicas contra el supuesto “candidato oficial” Ricardo Mejía Berdeja y luego de tres meses de aplazamientos, finalmente la dirigencia nacional de Morena emitió la convocatoria para elegir al coordinador de los Comités de Defensa de la 4T en Coahuila, que luego se convertirá en candidato a gobernador.
A pesar de que las bases de la convocatoria parecen responder a las necesidades y condición del subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, por lo menos el aspirante exsenador y expanista Luis Fernando Salazar Fernández ha refrendado la decisión de registrarse hoy mismo, con la convicción de que él sí reúne todos los requisitos, al tiempo que rechaza que Mejía Berdeja encabece las encuestas. Los días señalados en la convocatoria son hoy y mañana.
Salazar Fernández se ha mantenido al margen de las acusaciones que mutuamente se han lanzado, lo mismo en redes sociales como en desplegados periodísticos el senador Armando Guadiana Tijerina y el funcionario federal.
Llama la atención que las bases prohíban a quienes sean aspirantes “realicen acusaciones públicas contra el Partido, sus órganos de dirección u otros aspirantes y protagonistas o, en su caso, cometan actos de violencia física contra otros miembros o el patrimonio del Partido.” Por supuesto, la sanción es el retiro del registro. Guadiana acusó a RSMB de realizar actos anticipados de campaña con recursos públicos y de orquestar una campaña en su contra. El colaborador del presidente AMLO señaló que el senador ha entrado en complicidades y corruptelas con los priistas y de malos manejos como empresario minero.
Pero más censurable a los ojos de la opinión pública resulta que la convocatoria no exija a los aspirantes un mínimo de residencia en la entidad, como sí lo exigió en el caso del Estado de México. Y es que Ricardo Sóstenes Mejía, ex diputado local por Guerrero hace cuatro años no puede acreditar cinco años de residencia en Coahuila y tampoco para ser candidato a gobernador, pues la Constitución del Estado establece un mínimo de cinco años.
Para los seguidores de LFSF nadie en su sano juicio postularía a la Gubernatura a un desarraigado con 17 años fuera de Coahuila y que ha incumplido su encomienda de combatir la inseguridad en el país.
El doce de diciembre Morena tendrá en Coahuila a quien abanderará para la elección de gobernador del cuatro de junio.
