Juan Antonio Martínez Barrios
La brutal agresión y el cinismo
En los últimos días los actores políticos del país se han volado la barda con posturas y declaraciones insólitas y hasta cargadas de cinismo, y también han surgido llamados prudentes al diálogo y al respeto.
Como para abrir boca, Andy López Beltrán se vio envuelto en un escándalo al realizar un viaje de placer a Tokio, que incluyó compras en tiendas muy exclusivas, contrarias a la austeridad que pregonan Morena y la 4T. El hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador reapareció este lunes en la ceremonia del informe presidencial de Claudia Sheinbaum Pardo. Para justificar el dineral gastado el junior declaró que decidió tomarse unas vacaciones “después de las extenuantes jornadas de trabajo”.
Hace una semana los senadores Alejandro Moreno, “Alito”, dirigente nacional del PRI, y Gerardo Fernández Noroña, que terminaba su responsabilidad como presidente del Senado, protagonizaron una fuerte discusión que derivó en empujones en la tribuna del legislativo. Noroña se quejó posteriormente en diferentes medios y en ruedas de prensa que había sufrido una “brutal agresión” de parte de seis priistas que lo obligaron a huir del lugar. Días antes, con motivo de las vacaciones, Fernández Noroña aseveró que él no tiene “la obligación de ser austero”.
Una de las reacciones a las quejas de Fernández Noroña por la presunta agresión provino del periodista Ciro Gómez Leyva, quien le dijo al legislador que él había sufrido un ataque a balazos dirigidos a su cabeza, mientras que lo del senador “fueron unos pinches empujones”.
El gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas no fue ajeno a la polémica. El mismo lunes, al acudir al informe de Claudia Sheinbaum, y responder preguntas de la prensa, consideró que Noroña “se lo merecía”, y que “se ganó los empujones” propinados por el líder priista. Este último siguió criticando a Morena, del que, puntualizó, “ejerce un terrorismo de estado”, es “un cártel que hizo un pacto con el narco”. Entonces la presidenta Sheinbaum demandó elevar el debate político y condenó el ejercicio de la violencia.
Mientras tanto el empresario Ricardo Salinas Pliego le entró al futurismo y en una entrevista reconoció que pudiera participar como candidato a la Presidencia de la República en 2030, aunque admitió que desconoce si sería un buen aspirante. “¿Qué queremos? Queremos un buen candidato con valores. No robar, no matar, no mentir”.