El potencial de México para la integración de cadenas de suministro con Estados Unidos
Francisco Treviño Aguirre
La creciente popularidad de México como destino de nearshoring no es sorprendente. El país cuenta con una fuerza laboral calificada, un entorno empresarial favorable y una ubicación cercana a los mercados de América del Norte. Además, los acuerdos comerciales de México con otros países lo convierten en un escenario ideal para las empresas que buscan expandir sus oportunidades de negocios.
Sin embargo, implementar una estrategia de nearshoring requiere una planeación cuidadosa y la consideración de factores legales, económicos y culturales. Las empresas deben analizar varios aspectos legales, incluyendo la legislación laboral, migración, leyes corporativas, comercio exterior y aduanas, regulaciones energéticas, inmobiliarias, protección de marcas registradas y derechos de propiedad intelectual. Estos factores pueden tener un impacto significativo en la capacidad de una empresa para establecer una operación exitosa en México.
El desarrollo de cadenas de suministro integradas entre México y Estados Unidos, que cubren diversos sectores económicos como manufactura, automotriz, aeroespacial, agricultura y textiles, ha contribuido a que México conserve su lugar como el segundo socio comercial más grande de Estados Unidos en 2021 después de Canadá. Si más empresas comienzan a acercarse a México, tendría un impacto considerable y mejoraría significativamente la posición económica de México más allá de la perspectiva de cinco años.
Casi el 88 por ciento de las exportaciones mexicanas con destino a Estados Unidos se transportan por carretera, lo que significa que el comercio bilateral entre los dos países generalmente evitó las interrupciones relacionadas con contenedores y puertos que han afectado el comercio marítimo mundial durante el año pasado. Sin embargo, es probable que las empresas que se trasladen a México en los próximos cinco años sigan enfrentando riesgos relacionados con la seguridad, en particular el robo y la extorsión de cargamentos por carretera. Los casos reportados de extorsión aumentaron un 28 por ciento interanual en todo el país durante el primer semestre de 2022, siendo los centros de fabricación Guanajuato y Nuevo León los que reportaron el mayor aumento en la incidencia.
Además, las empresas deben definir si tienen la intención de importar bienes definitivamente para permanecer en el país por tiempo ilimitado o importarlos temporalmente para permanecer en territorio mexicano por un tiempo limitado. Más allá de los aspectos corporativos, fiscales y laborales, desde una perspectiva estrictamente de comercio exterior y aduanas, es crucial determinar si los bienes serán importados de manera definitiva o temporal.
La meta de México es sustituir al menos el 25 por ciento de las importaciones asiáticas con productos manufacturados en América del Norte en los próximos años. Este objetivo es significativo y el nearshoring podría generar un aumento de 35 mil millones de dólares en las exportaciones mexicanas con destino a los Estados Unidos, según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Además, la materialización de estas oportunidades depende de una resolución favorable de la disputa energética en curso entre México, Estados Unidos y Canadá. La cumbre en sí misma representó el último de una serie de indicadores positivos durante los últimos seis meses, lo que sugiere que es probable que se resuelva la disputa antes de llegar a un panel de arbitraje.
En general, México presenta una opción atractiva para las empresas que buscan reubicar su cadena de valor. La fuerza laboral calificada del país, el entorno favorable para los negocios y la proximidad a los mercados norteamericanos, junto con sus acuerdos comerciales con otros países, lo convierten en un escenario ideal para las empresas que buscan expandir sus oportunidades de negocio.
Twitter: @pacotrevinoa