Tesla y la detonación
Juan Antonio Martínez Barrios
Aunque está muy desgastado el verbo detonar, la megainversión que realizará la empresa Tesla viene a revitalizarlo pues la cadena de proveedurías que generará impacta a Coahuila, principalmente la región sureste, pero algo alcanza La Laguna.
Una verdadera detonación provocará la confirmación de ese monstruo que es la empresa de clase mundial dedicada a la industria de los autos eléctricos, que se establecerá en Santa Catarina, Nuevo León, a 9 kilómetros de Monterrey y a 70 de Saltillo, con una inversión inicial de mil millones de dólares y que en etapas posteriores superará los 5 mil millones. Ocupará una superficie de más de mil hectáreas y será la fábrica de este tipo de autos más grande del mundo.
Representantes de cámaras industriales y de comercio y autoridades estatales de Coahuila y Nuevo León han expresado su beneplácito ante la confirmación de la multimillonaria inversión y la derrama que generará. También le han llovido críticas al presidente, Andrés Manuel López Obrador, por poner en riesgo la instalación de Tesla en México, al grado de que se manejó la especie de que la empresa de Elon Musk pudo optar por establecerse en Indonesia.
Los empresarios de Saltillo y de La Laguna hablan de la inminencia de nuevos polos de desarrollo, de la vocación industrial del norte del país, de las inversiones satélites o periféricas, de la probada calidad de la mano de obra, de la gran cantidad de trabajo que les espera a los proveedores de la industria automotriz y de que empresas laguneras se adherirán a la gran cadena de proveeduría que provocará esta empresa trasnacional.
Por lo que hace a Coahuila, viene a cobrar una mayor relevancia el Corredor económico del norte en marcha, como forma de fortalecer la infraestructura carretera, de la que forman parte de los seis libramientos que se crearán este año en los municipios de San Pedro, Cuatrociénegas, Sacramento, San Buenaventura, Nadadores y Zaragoza, con el propósito de crear una vía rápida de Torreón a las ciudades fronterizas de Acuña y Piedras Negras. Es decir, que Coahuila estará preparado para darle la bienvenida a ese monstruo llamado Tesla. Esto sí que es detonar la economía.
