Los partidos y las precampañas
Juan Antonio Martínez Barrios
A diez días de que concluya la etapa de las precampañas electorales para gobernador, Morena no ha terminado con sus problemas suscitados en la designación de su precandidato y mantiene su pleito con el aspirante del Partido del Trabajo, Ricardo Sóstenes Mejía Berdeja, que sigue sin asimilar que Armando Guadiana haya sido el elegido por la dirigencia nacional del partido del presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Ambos precandidatos han perdido tiempo lanzándose mutuas acusaciones, que salpican al líder nacional de Morena, Mario Delgado, quien también se sube al ring para tildar de traidor a Mejía Berdeja y de haber traicionado la confianza de López Obrador.
Morena tiene pendiente la expulsión de 22 militantes, entre los que figuran el diputado federal Francisco Javier Borrego; la presidenta del Consejo Estatal, Yamille Mtanous; la exdiputada Miroslava Sánchez, regidores e integrantes del Comité Ejecutivo Estatal, de acuerdo con la denuncia interpuesta por el mismo Mario Delgado ante la Comisión de Honestidad y Justicia, por haber expresado su apoyo y acudido a mítines del exsecretario de Seguridad Pública federal.
Mientras Guadiana Tijerina no deja de hacer llamados a la unidad, sabedor de que una parte de los morenistas siguen simpatizando con Ricardo Sóstenes Mejía, el precandidato petista no ceja en su estrategia de lanzar ataques y descalificativos al senador con licencia, al líder nacional de Morena y al gobierno estatal.
Su contraparte, Lenin Pérez Rivera, precandidato por la alianza UDC-Partido Verde, desarrolla una precampaña más organizada, dando prioridad a las propuestas, quizá sin tanto reflector pero que llega a todas las regiones de la entidad.
Y por su parte, el precandidato de la coalición PRI-PAN-PRD, Manolo Jiménez Salinas, conserva una intensa y amplia actividad proselitista hacia los grupos de militantes y simpatizantes de los tres partidos involucrados en una alianza a la que no se le advierte grieta alguna, sino por el contrario, cada vez más amalgamada, con personajes destacados tanto en el PRI, como en el PAN y en el PRD sumados activamente a la precampaña.