En lo que va de 2022, los meses con más feminicidios en Morelos han sido marzo y abril, con siete en cada mes. En febrero, mayo, junio y septiembre hubo tres, mientras que en agosto fueron dos y no hubo registros en enero y julio.
LaOtraPlana.com.mx
Los feminicidios en Morelos registran un repunte este año: en el periodo de enero a septiembre, en la entidad se contabilizaron 28 casos, cifra que ya supera a los 24 que hubo en todo 2021, de acuerdo con las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
En lo que va de 2022, los meses con más feminicidios en Morelos han sido marzo y abril, con siete en cada mes. En febrero, mayo, junio y septiembre hubo tres, mientras que en agosto fueron dos y no hubo registros en enero y julio.
Los 28 feminicidios contabilizados en Morelos entre enero y septiembre rebasan ya a los 23 del mismo periodo de 2021.
En años anteriores, en los mismos periodos enero-septiembre, se contabilizaron 18 feminicidios en 2018, 28 en 2019 y 28 en 2020.
Consultada sobre su metodología para registrar los feminicidios, la Fiscalía General de Morelos señaló que en las muertes de mujeres las autoridades aplican un protocolo de atención con perspectiva de género para determinar si hay un posible feminicidio o no.
En los últimos días, sin embargo, la institución ha recibido críticas por su trabajo en el caso de la joven Ariadna Fernanda López, cuyo cuerpo fue encontrado abandonado en una carretera en el municipio Tepoztlán.
La fiscalía de Morelos señaló en un principio que Ariadna murió por una “grave intoxicación alcohólica”, conclusión que la familia rechazó.
Días después, la Fiscalía General de la Ciudad de México, entidad donde Ariadna López fue vista con vida por última vez, informó que investiga un posible feminicidio. Hasta la fecha, la institución ya ha detenido a dos personas —una mujer y un hombre— por su presunta relación con el caso.
Recientemente, la familia de Alondra, una adolescente de 16 años asesinada a principios de 2022, denunció omisiones en la investigación por parte de la fiscalía de Morelos, mientras que apenas este miércoles autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo de otra mujer en la alcaldía Tlalpan, en la carretera México-Cuernavaca, vía que une a la CDMX y Morelos.
Malas investigaciones se quedan sin sanción
Blanca Ivonne Olvera, profesora de Derecho Penal en la UNAM, advirtió que el feminicidio no solo ha aumentado en Morelos sino en otras entidades del país, lo que atribuyó a factores como falta de capacitación del personal de las fiscalías y a que no hay sanciones para las y los funcionarios que realizan mal una investigación.
“Hay un factor de impunidad con el que actúan las autoridades, ya sea por desconocimiento o por actos negligentes, y entonces, esto convierte a las investigaciones en fallidas”, dijo en entrevista.
“No es la primera vez que nos dicen que la víctima es la responsable, porque también nos lo dijeron con Lesvy, porque también nos lo dijeron con Mariana Lima, porque también nos lo dijeron con Debanhi. Nos dicen que las causas de muerte son provocadas por ellas mismas”, añadió la académica, en referencia a las primeras conclusiones de la fiscalía de Morelos que atribuyeron la muerte de Ariadna López a una “grave intoxicación alcohólica”.
Feminicidios en 2022: panorama nacional
En el periodo enero-septiembre, en todo el país se registraron 711 feminicidios, de acuerdo con las estadísticas del SESNSP.
La cifra representa un descenso de 10% respecto de los 790 que hubo en los mismos meses de 2021. Hasta ahora, el año pasado es el que más casos de feminicidio ha tenido en lo que va del sexenio, con un total de mil 016.
El 2018 cerró con 919, el 2019 tuvo 968 y el 2020 concluyó con 975.
Frente a esto, activistas, organizaciones feministas e investigadoras insisten en que esos números no reflejan la gravedad del problema de violencia contra las mujeres —e incluso pueden estarlo minimizando— y advierten sobre las fallas de las políticas de prevención del feminicidio.
De acuerdo con Olvera, tratar de dimensionar el fenómeno requiere que no solo se consideren los feminicidios, sino también, cuando menos, los homicidios dolosos contra mujeres y la falta de apoyo gubernamental a programas específicos, como los refugios para mujeres agredidas y sus hijas e hijos.
“Si en el feminicidio hay investigaciones fallidas, no se encuentra a nadie, pues entonces es un caldo de cultivo para decir ‘sigan matando mujeres, no pasa nada’”, alertó la académica.
(Con información de Animal Político)
