miércoles 30, abril, 2025

UNA TAZA Y DOS DE CULTURA

Sergio Arévalo

Con un nudo en la garganta

Llegan las tardes calientes a Coahuila y no precisamente por temas políticos y sociales, aunque también se agregan al ambiente. La primavera se hace presente y con ella la búsqueda de nuevas lecturas, cual es la sorpresa que entre los libros en oferta y los de exhibición, encontré como uno de los más vendidos del mes un libro de Amanda Lalena Escalante y ustedes dirán ¿Y ella quién es? O ¿de dónde salió? La verdad es más popular de lo que creemos solamente que muchas y muchos  no la conocemos en su faceta de escritora, más bien la recordamos  por su nombre artístico: Amandititita.

Así es, Amanda Lalena Escalante escribe y déjeme contarles  lo hace bastante bien para mi gusto. Tiene dos publicaciones al momento, en las cuales entre sus líneas comparte su historia personal en el que describe los momentos más difíciles, desde el rechazo que sufrió en sus inicios musicales hasta la relación con sus padres. En su primer libro más bien en forma de cuento y en ésta ya más personal. El libro que encontré de ella titulado “Un día contaré esta historia”, en donde nos comparte un pedazo de su  vida y como se dice coloquialmente si te deja en varias ocasiones con un nudo en la garganta.

Y no, no piensen que es una improvisada. Entiendo que en los últimos tiempos se ha puesto muy de moda que personajes del espectáculo, como youtubers, actores y cantantes, saquen sus libros, no olvidemos a Yordi Rosado el cual tiene más libros de los que uno pensaría (4) o que Yuya tiene su propio libro, pero esto es punto y aparte. La gente tiende mucho a juzgar estos hechos debido a la trascendencia y conocimientos que estos puedan tener sobre la ciencia de escribir un libro. Por lo que se entiende que al enterarse que Amandititita tiene un libro genere una especie de rechazo instantáneo.

El temblor que sacudió a la Ciudad de México y a nuestro país entero por el terrible acontecimiento en septiembre de 1985 es el punto de partida del libro biográfico de Lalena, “Un día contaré esta historia”, debido a que es el primer recuerdo complejo que tiene. Y del cual nos hace sentir partícipes, transmite sin complicaciones su sentir al ver a su madre derrumbarse como lo hizo el edificio donde vivía su padre.

El suceso en el que su padre, el ícono del rock en México “Rockdrigo” González perdió la vida, es para Amandititita la puerta de entrada a un escrito donde se abre a sus lectores y lectoras en una vida llena de caídas a las que se ha sobrepuesto. Y en la que ha dado la otra mejilla ante cualquier bofetada que le ha dado la vida.

Amandititita, cantante de un género bautizado por ella misma como anarcumbia, ha sido juzgada a lo largo de su carrera por el estilo tan popular y extravagante que decidió tomar. Muchas la recuerdan como un “chiste” como algo que de repente se hizo popular en la televisión pero que no todos entendían.

En el libro, la autora repasa desde sus días más resplandecientes al lado de su padre y madre, Mireya, hasta los momentos difíciles que tuvo que sortear en la infancia, en la juventud y en sus inicios en los escenarios bajo el nombre del proyecto musical “Amandititita”, por el que  fue fuertemente criticada por la prensa y por un público que no consideraba que encajaba con el legado de su padre.

La cantautora y escritora  quiere que este libro llegue a los padres que no se responsabilizan de sus hijos, así como a las madres que creen que sus hijos no se dan cuenta de que beben. Un tema incomodo y real, así como parte de la esencia de las canciones que la hicieron popular en su momento.

Debo aclarar o mejor dicho a invitar que no juzguen a Lalena por lo que han escuchado o visto de ella en medios de comunicación de la prensa rosa. La verdad no es una improvisada de las letras. A los 15  años empezó  estudiar en la Asociación de Escritores; a los 20 años se metió a la Dinámica de Escritores y a los 24 empezó con su carrera como cantautora en medios de comunicación.

Su libro “Un día contaré esta historia” se disfruta con un rico café o un té helado para estos tiempos políticos y ambientales tan calientes. Aunque creo no estaría de más una galleta para agregar algo dulce a este libro que es una bocanada de realidad de lo que muchas y muchos viven, como lo es convertirse tutores de sus propios padres a una edad muy temprana.

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