jueves 19, septiembre, 2024

A CONTRAPIÉ

Juan Antonio Martínez Barrios

La desvergüenza del sepulturero del PRI

Las reformas estatutarias al PRI, que abrirían la puerta de la reelección de su líder nacional, Alejandro Moreno, no son hechos consumados. La impugnación de los resultados de su XXIV Asamblea Nacional, presentada por cientos de priistas, tiene el sustento suficiente para invalidar la legitimidad de la asamblea.

En principio, se violentó la Ley General de Partidos, pues la citada asamblea se realizó antes de que hubiera concluido el proceso electoral del 2 de junio. Además, efectuada a puerta cerrada, no hay constancia de la supuesta aprobación de la modificación de los estatutos, que se habría realizado a mano alzada. Cuando se pidió la votación a los asambleístas las cámaras enfocaron hacia la mesa directiva que coordinaba los trabajos.

El artículo 178 de los estatutos del PRI establece que “Las personas titulares de la Presidencia y la Secretaría General electas para los Comités Ejecutivo Nacional y Directivos de las entidades federativas, durarán en su función cuatro años, y las electas para los Comités Municipales y de las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México, durarán en su función tres años, sin posibilidad de ser reelectos en ningún caso”.

Por lo demás está clarísimo que el sepulturero del PRI, Alejandro Moreno, tiene toda la intención de cavar la tumba del tricolor para desaparecerlo y quedar bien con el presidente, Andrés Manuel López Obrador. A Alito se le han resbalado todas las ácidas críticas que ha recibido, las demandas públicas de cientos o miles de priistas para que renuncie al cargo, hasta las exigencias para que sea investigado por corrupción y malos manejos. Es evidente que el campechano y su camarilla –su gurú Rubén Moreira y la secretaria general Carolina Viggiano- prefieren quedarse como únicos miembros del partido, antes de perder el poder.

Sin entrar en la discusión sobre la permanencia o no de Alejandro Moreno al frente del PRI, el dirigente estatal del partido en Coahuila, Carlos Robles, propone la formación de un Comisión Nacional encaminada a la toma de decisiones de manera colegiada. Para él la modificación de los estatutos no significa la reelección de alguien en particular. Robles Lostaunau pondera uno de los acuerdos: efectuar un análisis profundo en los estados y analizar qué es lo más conveniente, fortalecer las bases y revolucionarse como partido.

Los números son fríos y en este caso contundentes. Bajo el mandato de Alito el PRI ha perdido 11 gubernaturas, pero busca reelegirse por tres períodos más de tres años cada uno. 16 exgobernadores y más de 250 destacados priistas firmaron un desplegado para exigir la renuncia de Moreno Cárdenas.

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