Luis Alberto Vázquez
“Las veredas quitarán, pero la querencia ¿Cuándo?”
Dicho ranchero mexicano
Una infinidad de personas, masculinos todos hasta ahora, han utilizado múltiples medios para ocupar el ejecutivo federal; desde el voto popular, la sucesión legítima y hasta las armas para llegar, a veces por décadas, otras por minutos; algunos una sola vez, otras en múltiples ocasiones y hasta varios ejecutivos simultáneos. Conozcamos algunas anécdotas de la llegada a la Presidencia de la República en situaciones diferentes, tanto legales como ilegales, según las normas jurídicas vigentes al momento histórico analizado.
HA HABIDO MUCHAS MÁS PROTESTAS AL CARGO PRESIDENCIAL QUE PERSONAS PROTESTANDO. Cada ocasión que una persona asume el cargo del supremo poder ejecutivo, debe tomar protesta ante el congreso y sobre la constitución, Ha habido quienes protestan varias veces, tal fue el caso de Antonio López de Santa Anna (11); Porfirio Díaz (9) Nicolás Bravo (3); Valentín Gómez Farías (4); Anastasio Bustamante (3).
PRESIDENCIAS COEXISTENTES: Ha habido momentos en que varios se declaran simultáneamente presidente de la República: Seis entre 1858-1860: Benito Juárez (Constitución de 1857); Félix María Zuloaga (Plan de Tacubaya); Manuel Robles Pezuela (Plan de Ayotla); José María Salas (Plan de Tacubaya); Miguel Miramón (conservadores, el presidente más joven de la historia, Niño Héroe en 1847, dos veces presidente) y José Ignacio Pavón (SCJN). Cuatro en 1914/15 Eulalio Gutiérrez Ortiz, (Convención de Aguascalientes); Roque González Garza (tratado Villa/Zapata); Francisco Lagos Cházaro (Convención por parte de los Carrancistas) y Venustiano Carranza por el Plan de Guadalupe.
MUERTE EN FUNCIONES: Solamente un presidente fue asesinado: Carranza (1920); Juárez murió de angina de pecho (1872). A Guerrero y Miramón los fusilaron cuando ya habían dejado el cargo igual que el asesinato de Madero y a Obregón, que ya era presidente electo, lo asesinaron 4 meses antes de reasumir el cargo.
MILITARES GOLPEADORES: utilizando las armas conferidas por el presidente en turno para defender a la patria. le dieron golpe de estado ocupando su lugar: Mariano Paredes y Arrillaga en 1846 y Victoriano Huerta en 1913.
VÍA SCJN: Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada y José María Iglesias.
SIN UNA PARTE DE SU CUERPO: mancos: Manuel González y Álvaro Obregón; cojo Santa Anna.
DOS PERSONAS DIFERENTES PROTESTARON EN UN SOLO DÍA AL CARGO: 19 de febrero de 1913, tras la aceptación de la renuncia de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez como presidente y vicepresidente, asumió el cargo el secretario de Relaciones Exteriores, Pedro Lascuráin, quien inmediatamente designó secretario de Gobernación a Victoriano Huerta, enseguida presentó su renuncia y por ministerio de ley, Victoriano Huerta asumió el cargo.
UN PRESIDENTE DECLARÓ GUERRA INTERNACIONAL SIN AFECTAR EL TERRITORIO NACIONAL. Las guerras con otras naciones han sido defensivas; 1829 contra España. 1836 y 1862 contra Francia. 1846 contra Estados Unidos. El 28 de mayo de 1942, Manuel Ávila Camacho declaró la guerra a Alemania, Italia y Japón en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
Desde 1934, los presidentes han cumplido su PERÍODO COMPLETO, del 1 de diciembre al 30 de noviembre 6 años después hasta ahora, el actual concluirá el 30 de septiembre (dos meses antes). Las fechas de protesta han sido 1 de abril, 1 de diciembre y este año 1 de octubre.
Dos presidentes se han distinguido por su ACRISOLADA HONRADEZ: Melchor Múzquiz (1832) y Juan Álvarez (1855) de ambos se puede decir la frase del segundo: “pobre entré a la Presidencia y pobre salgo de ella”; en el caso de Múquiz no hubo ni para enterrarlo.
NOMBRES: José (nueve) combinados con María; Mariano (3), Miguel, Justo, Joaquín e Ignacio. Manuel (7). Francisco (4) y Adolfo (3).
La democracia nos ofrece una gigantesca oportunidad de “SER” es decir, de encontrarnos a nosotros mismos por nuestros comportamientos en los comicios; dicho más claramente; el talento de los votantes se identifica perfectamente por el destino de su sufragio; se armoniza a través de una auténtica identidad simbiótica con la candidatura elegida. Repito con más claridad: las personas sufragan por aspirantes intrínsecamente idénticos a sí mismo; el inteligente va con el eficientemente calificado y así, idóneamente, se nivelan preferencia en los comicios, o mejor aún, acatemos el nuevo paradigma popular: “Dime por quien votas e inferiré instantáneamente tu capacidad intelectual y ética”.