Jesús Vázquez Trujillo
El primer Mesías político
El Lic. Miguel Alemán Valdés, llegó al poder en 1946 con aires de modernización, la segunda guerra mundial trajo a nuestro país grandes beneficios económicos, con Miguel Alemán se inició la época del desarrollo financiero. El llamado “Milagro Mexicano”.
Sin embargo, estos beneficios trajeron aparejados algunos vicios como la corrupción gubernamental, el “amiguismo”, y el tráfico de influencias.
Todos estos factores, incomodaron sobremanera a los sectores sociales y organizaciones de izquierda, quienes veían perjudicados sus intereses con las políticas públicas del alemanismo.
Además de que el presidente envió al Congreso de la Unión una iniciativa de ley, para modificar el artículo 27º constitucional, creando el derecho a la propiedad privada.
Esto hizo que los sectores de izquierda apoyaran la candidatura presidencial del general Miguel Henríquez Guzmán, un viejo general revolucionario que creía que los militares debían recuperar la Presidencia de la República.
General Miguel Henríquez Guzmán.
Sin embargo, como el PRI había excluido al sector militar de sus filas, Henríquez Guzmán, buscó su candidatura presidencial en la Federación de Partidos del Pueblo FPP.
Una coalición política integrada con pequeños partidos regionales, que no quisieron integrarse al PRI.
La campaña henrriquista contaba con el apoyo de los generales revolucionarios de tendencia izquierdista que se habían distanciado del presidente Miguel Alemán.
Entre ellos se encontraban: Francisco J. Mújica, Cándido Aguilar, así como el ex presidente Lázaro Cárdenas, Ernesto Soto Reyes, César Martino, Wenceslao Labra, Bartolomé Vargas Lugo, dirigentes obreros y campesinos como Celestino Gasca y Graciano Sánchez, funcionarios del servicio exterior y el ejército como Antonio Espinoza de los Monteros y Marcelino García Barragán, se pronunciaban por la candidatura de Miguel Henríquez Guzmán a la presidencia de la República
El general Miguel Henríquez Guzmán, tenía el ideario político cardenista por lo cual deseaba regresar a México al sistema socialista.
Ante la fallida intentona reeleccionista de Miguel Alemán, el PRI designó como candidato a la presidencia a su Secretario de Gobernación, don Adolfo Ruiz Cortines.
Las elecciones se llevaron a cabo el domingo 7 de julio de 1952, en las cuales don Adolfo resultó vencedor.
Sin embargo, los henriquistas se negaron a reconocer el triunfo de Ruiz Cortines e hicieron una celebración en la columna de la independencia para proclamar triunfador al general Miguel Henríquez Guzmán.
El festejo henriquista fue reprimido violentamente por el ejército, y varios de sus partidarios fueron aprehendidos y encarcelados en Lecumberri, procesados bajo cargos de Disolución Social.
En cuanto al general Miguel Henríquez Guzmán, se retiró de la política y de la vida pública.
Mitin henriquista en Hermosillo, Sonora, durante la campaña electoral de 1952
