sábado 23, noviembre, 2024

La Columna

Javier López Medina

Comida China. Las tres claves. Microeconomía aplicada

“Lo importante es saber aprender”
Mao Tse Tung

Durante los últimos cinco años he trabajado en el proyecto de comida China
Lili, bajo una estrategia de guerra de guerrillas. Y a pesar de los “relativos”
buenos resultados, las utilidades son incomparables con las comidas chinas
ubicadas en lugares clásicos o tradicionales.
Ahora, después de haberme preparado 200 horas para impartir un curso de
microeconomía aplicada y haber estado frente a grupo 18 horas, me
propongo nuevamente a reflexionar sobre el tema.
Las comidas chinas tradicionalmente se ubican en las Sorianas, Mall, Sams,
plazas comerciales, centros comerciales, centro de la ciudad, puntos donde
circulan miles de gentes todos los días. Pero en mi caso, por el pequeño
presupuesto, me he ubicado fuera de esos puntos, bajo una estrategia de
“Guerra de Guerrillas”. Lo cual significa ubicarse en un lugar lejano, sin
competencia y a bajo costo: Villa Juárez, en Lerdo; o La colonia Chapala, en
Gómez Palacio; por ejemplo.
Con la preparación del curso de microeconomía, y mi experiencia práctica en
ese mercado, he sacado algunas conclusiones que me propongo enunciar
ahora.
Pero antes tenemos que aclarar el tipo de bien que es la comida china;
atendiendo que la microeconomía, distingue entre “bienes normales” y
“bienes inferiores”.
Para la microeconomía un “bien normal”, es un bien que incrementa su
demanda cuando hay incremento de ingresos o un incremento esperado de los

ingresos en el futuro. Y un “bien inferior” es aquel que incrementa su
demanda cuando hay una reducción de los ingresos o una reducción de los
ingresos esperados en el futuro.
Aclarado un asunto esencial del tema que nos atañe, podemos decir que la
comida china es un “bien normal”, eso significa que cuando los ingresos de
los consumidores son altos, la demanda de la comida china, es alta. Y cuando
son bajos, su demanda baja.
Creo en la síntesis de dicha reflexión, las claves están en tres factores:
El nivel de ingresos
La primera clave está en un punto con consumidores de ingresos altos. Estos
se encuentran en los puntos clásicos o tradicionales de la comida china.
Como la comida china es un bien “normal”, cuando los ingresos son altos, los
consumidores incrementan la demanda de dicho bien y disminuyen la
demanda de bienes que consideran “bienes inferiores” como las gorditas, el
pollo, los chicharrones, las papas fritas, entre muchos otros. De esta manera
la curva de demanda de la comida china se desplaza a la derecha, crece el
consumo a todos los precios en un mercado de ingresos altos.
Pero si el negocio lo sitúa en un “punto” de consumidores con ingresos bajos,
entonces los consumidores van a preferir los “bienes inferiores”, dicho
consumo de bienes crece cuando el ingreso es bajo o disminuye. Los
consumidores de la comida china irán a comer, gorditas, sopa, “marucha”,
tacos de canasta, tacos sudados y otros productos que aumentan su
demanda cuando el ingreso disminuye. Entonces la curva de demanda de la
comida china se mueve hacia la izquierda y se reduce la demanda a todos los
precios.
Vayamos a la realidad concreta y analicemos un punto como la Soriana
donde se ubican las diferentes comidas chinas y el último punto donde me

ubiqué hace 6 meses, que es en la Colonia Chapala de Gómez Palacio.
Comparemos:
Los ingresos de las personas o familias que van a un lugar clásico donde se
instalan las comidas chinas es en promedio de 75 mil pesos mensuales. Los
ingresos de las personas que viven en Chapala, fluctúan entre los 4,500 a 20
mil pesos mensuales.
Bienes sustitutos
En una Soriana, un City Club o un SAM´S, los negocios que le pueden
competir a la comida china, pueden ser de 3 a 5 competidores, entre ellos
hamburguesas, pizzas, pollo y otros. En Chapala pueden ser de 200 a 300
competidores con bienes sustitutos, es decir con comida que pueden escoger
los consumidores, en vez de la comida china. Chapala es una romería. Hay
una enorme oferta de comida, de todo tipo y a todas horas. Es una pequeña
ciudad, donde hay de todo.
Tamaño de la población
Ahora veamos el tamaño de la población. La población promedio que va de
compras a una Soriana, es de 16,000 personas diarias; las que vive en
Chapala es de 7000 (Sin contar la colonia Valle Chapala, que son 13,500).
Ahora imagine de las 7,000, las que van a comprar comida fuera de casa, los
que van a cocinar en casa, las que llegan a trabajar y las que salen. El
escenario se torna un mercado altamente volátil para la comida china.
Conclusión, para mejorar sustancialmente la maximización de la utilidad del
proyecto, se requiere ubicarse en un punto clásico, o una zona con
consumidores de ingresos altos, población grande y pocos bienes sustitutos.
Pd. En la estrategia de guerra de guerrillas no todo está perdido. “Cada
fracaso nos hace más listos”. Dijo el filósofo, Mao Tse Tung.

+ Javier López Medina es licenciado en Economía, licenciado en
Estadística, tiene la maestría en Administración y Políticas Públicas, y
es Maestro en la materia de Aplicar análisis microeconómico I. En la
Facultad de Contaduría y Administración, de la Universidad Autónoma
de Coahuila, Unidad Torreón.

Compartir en: