El ‘nuevo INE’
Julián Parra Ibarra
En los tiempos en que coincidieron Lorenzo Córdova y Ciro Murayama como consejeros del INE, con la autoproclamada cuatroté, los embates recibidos desde Palacio Nacional fueron intensos y permanentes. En la parte que se supone que es donde a la gente más ‘le calienta’, la parte de los pesos y los centavos, se revelaba información de supuestos gastos superfluos, los sueldos de los consejeros que ‘ganaban más que el presidente’, y los que nunca se logró bajar como pretendía el inquilino de Palacio, simple y sencillamente porque la ley no lo permite. Siempre se ejerció una presión sobre el presupuesto a asignar al árbitro electoral.
A finales del año pasado, en la discusión del Presupuesto de Egresos de las Federación para ejercer en este 2023, al INE se le recortaron cerca de 5 mil millones de pesos sin que se tocaran las prerrogativas de los partidos –no, si los diputados pendejos no son, no se iban a dar un balazo en el pie-, por lo que fue el Instituto el que tuvo que absorber el recorte. Finalmente, se le asignaron 13 mil 978.8 millones de pesos.
En la era del ‘nuevo INE’ encabezado ahora por Guadalupe Tadei, está solicitando ya desde ahora un presupuesto de 37 mil millones de pesos, de los cuales 23 mil 757.45 millones de pesos son para presupuesto base que incluye gastos operativos y proyectos; 10 mil 444 millones de pesos de prerrogativas para los partidos, a los que, en el anterior presupuesto -el que se está ejerciendo este año-, les asignaron 6 mil 233.510 millones de pesos.
El año pasado en la cámara de diputados se les negó un presupuesto de 4 mil millones de pesos de ‘presupuesto precautorio’, para en caso que se solicitara alguna consulta popular o hubiera necesidad de realizar una elección extraordinaria en algún distrito o alguna entidad del país. Para ejercer el año entrante, el ‘nuevo INE’ está solicitando 3 mil 568 millones de pesos para ese rubro precautorio.
¿Ahora que ya no están ni Córdova ni Murayama la autoproclamada cuatroté ya no piensa asfixiar presupuestalmente al INE? ¿Guadalupe Tadei logrará los 37 mil millones de pesos que está solicitando solo para el año entrante? Finalmente, y como dice uno de los lugares comunes más usados por el presidente: Amor, con amor se paga. Y el nuevo INE –al igual que el TEPJF- han sido lo suficientemente complacientes, laxos, tolerantes, permisivos con el partido del presidente para que las mal llamadas corcholatas hayan adelantado más de un cuatrimestre el inicio oficial del proceso, aunque con ello hayan tenido que asumir una actitud similar con los del Frente Opositor.
¿Usted qué cree, que seguirá el intento de asfixia presupuestal al INE, o que Guadalupe Tadei logrará el presupuesto planteado? Ya veremos.
@JulianParraIba
